Las criptomonedas, el papel de los bancos centrales, los reguladores, las monedas digitales, el juego y el metaverso, ya nada es un misterio, el desconocimiento y la no interacción en estos planos será o ya es una utopía. Más allá del deseo de unos y otros, nos vemos ahí: Primera parte.
Más allá de las enormes cifras que ya se han volcado a la industria de criptoactivos, como bien dijera César antes de cruzar el Rubicón, la suerte está echada, las criptomonedas y el metaverso ya son parte del desarrollo universal del hombre. No es una mera especulación intelectual, es un hecho, una realidad.
A fines del tercer trimestre de 2021, la sorprendente carrera alcista vio más de 15.000 millones de dólares invertidos en nuevas empresas de tecnología blockchain. Se colocaron cientos de millones de dólares como apuestas en productos habilitados para blockchain con potencial de crecimiento exponencial.
Eso es lo que los fondos, los angel inversores y las instituciones esperan de su dinero en cierto sentido cuando invierten en proyectos con poca tracción y grandes ideas.
La financiación de capital de riesgo es una de las mejores formas de rastrear quién y en qué están apostando o invirtiendo.
A modo de ejemplo y comparación, podemos analizar cuánto y en qué industrias se está apostando ahora mismo: en septiembre del año pasado, las ciencias de la vida habían recaudado 103.000 millones de dólares; las FinTech recaudaron casi el doble que el año anterior con 91.500 millones de dólares.
Se han apostado casi 18.000 millones de dólares en nuevas empresas que respaldan la transición del vehículo eléctrico y las nuevas empresas relacionadas con la alimentación vieron una financiación de más de 16.000 millones de dólares solo en junio del año pasado.
Con este breve repaso, es fácil ver que los fondos de capital de riesgo básicamente apuestan por las tecnologías que imaginan como una parte importante de nuestro futuro colectivo.
Ahora, el ejercicio es tratar de vislumbrar cómo será el 2031, ¿cómo se materializan esas apuestas?
El futuro de cripto
Las criptomonedas, con sus idas y vueltas, alzas, bajas, así y todo, la industria sigue siendo tan fuerte como siempre, pero aún llevará tiempo y tal vez hasta otras crisis antes de que vean la adopción generalizada. La idea es tratar de vislumbrar cómo se verá al final de este juego.
Stablecoins frente a los CBDC
Las stablecoins (monedas estables) pueden percibirse como una amenaza para los monopolios gubernamentales sobre la oferta monetaria: USDT es un reemplazo basado en blockchain para el USD, un producto que hasta ahora solo ha sido acuñado por la Reserva Federal.
Cuando se introduzcan las monedas digitales del banco central (CBDC, por sus siglas en inglés), las cosas cambiarán para las monedas estables.
Los CDBC, al ser monedas digitales (no vinculadas) en la blockchain, reducen significativamente la necesidad de tokens como USDC, USDT, DAI y otras monedas que dependen de una variedad de mecanismos para inyectar tokens con un valor constante (estable).
La capitalización de mercado de las CBDC también será de decenas de billones de dólares y los “tokens” servirán como moneda de curso legal por diseño. ¿Qué casos de uso reales quedan para las monedas estables no gubernamentales?
Cuando se trata del mejor de los casos para 2031, hay algunas suposiciones que sostengo como los resultados más realistas.
Una división aproximada del 20 % de monedas gubernamentales, el 30 % de monedas corporativas y el resto de monedas totalmente descentralizadas. Con muchos países introduciendo restricciones en efectivo y pagos no digitales, no es improbable que en 2031 muchas jurisdicciones prohíban por completo las transacciones en efectivo de más de 100 dólares y hagan la transición a criptomonedas impulsadas por blockchain.
¿Qué harán los gobiernos en un futuro cercano?
Ya se han lanzado CBDC en varios países del Caribe, así como en Nigeria. Mientras tanto, 78 países han iniciado iniciativas y proyectos con India entre los de más alto perfil con el objetivo de introducir una rupia digital para 2023.
Lo que todos estos tienen en común es que el valor de la CBDC está vinculado a la moneda fiduciaria pero aprovechan las ventajas de una criptomoneda, eliminando intermediarios y creando una forma fluida de acceder y usar el dinero.
Al volverse no fungible cada unidad monetaria única, habrá un historial perfecto junto a una serie de propietarios que han sido gravados o subvencionados de acuerdo con las leyes vigentes. Esto proporciona a los gobiernos un conocimiento perfecto de los saldos de cada persona y les ayuda a mantener el control total sobre cómo se moverán estos activos.
El Fondo Monetario Internacional identifica este proceso en curso como “criptoización”, que es más notable en los mercados emergentes y las economías en desarrollo:
“cuando estos [cripto] activos reemplazan la moneda nacional y eluden las restricciones cambiarias y las medidas de gestión de la cuenta de capital [esto es criptoización]”.
Desde el FMI advierten además que la capacidad de las criptomonedas para “operar a través de las fronteras” representa un riesgo para desestabilizar los flujos de capital y esto ocupará un lugar destacado en la lista de problemas que los bancos centrales deben abordar antes de lanzar una criptomoneda respaldada a nivel nacional.
La privacidad está en juego
La investigación está en curso en los principales actores, como los Estados Unidos y el Reino Unido, y no está claro cómo estos gobiernos pretenden emitir un CBDC cuando la falta de control es un problema: es probable que haya un nivel de intrusión que inquiete a muchos adoptantes de criptografía. Para combatir el blanqueo de capitales, otros delitos financieros y la financiación del terrorismo habrá que acabar con la privacidad.
Nos guste o no, este es un resultado razonable del progreso en el espacio y puede dar forma a la forma en que interactuamos con nuestro gobierno durante muchos años. Los gobiernos cambian mientras que los mecanismos de control permanecerán para siempre, por lo que hay motivos para mantener un sano escepticismo.
Un resultado alternativo serían las monedas digitales respaldadas por el estado que compiten con las monedas no gubernamentales, donde mantener la moneda del gobierno sería menos especulativo que las monedas corporativas o descentralizadas.
Surgen muchos casos de uso que podrían simplificar las interacciones de una población con el gobierno y se podrían implementar reformas fiscales progresivas, que actualmente son inverosímiles.
Por ejemplo, podría emitir un impuesto sobre las compras en función de la cantidad total de activos que se posean y se recaudará automáticamente como IVA personal.
Una década de NFT: metaverso y juegos
Los tokens no fungibles se encontraron a la vanguardia de múltiples cambios de paradigma en desarrollo, con megaconglomerados y capitalistas de riesgo haciendo apuestas de miles de millones de dólares. ¿Su apuesta? Los NFT serán una parte integral clave de los futuros mercados de juegos, metaversos y derechos digitales.
Durante los últimos 20 años, desde la introducción de juegos multijugador masivos con economías elaboradas, el santo grial estaba creando un puente que funcionaba correctamente entre las economías del juego y el mundo real. Sin embargo, lograr tal puente es increíblemente difícil.
Las economías en el juego son frágiles, los comportamientos e incentivos de los jugadores no son del todo predecibles y la moneda real puede ser un gran problema. Pagar para ganar, fraude, apuestas, regulación, todo entra en juego cuando uno puede ganar dinero jugando un juego en línea.
Los NFT formarán una parte central de cualquier economía de juego hipotética, ya que son un vehículo de valor tangible. Los jugadores pueden tratar directamente entre sí e intercambiar NFT, con miras a invertir en su futuro o mejorar el juego. Pero la adquisición de NFT no se limita al mercado: pueden ser una recompensa por completar misiones, derrotar a otros en JcJ y alcanzar hitos.
Lo que se puede lograr a través de la proliferación de NFT es un elemento de previsibilidad en la economía. Si bien el valor de la moneda del juego en sí puede fluctuar, el valor monetario de la vida real de un NFT debería, en teoría, permanecer más estable debido a su valor y función intrínsecos.
Suponiendo que el juego tiene un núcleo de jugadores que participan regularmente en la economía del juego, podemos ver a los jugadores cubriendo a través de NFT como una forma de almacenar valor mientras usan las monedas del juego como activos líquidos para lograr sus objetivos en la plataforma de manera más instantánea.
Este tipo de comportamiento sería consistente con el comportamiento del mundo real de las personas que acumulan efectivo y luego lo invierten en varios activos de almacenamiento de valor, como propiedad intelectual, acciones y bienes raíces.
Si estas dinámicas comienzan a tener lugar, podemos esperar que los desarrolladores integren las NFT como una piedra angular de sus economías de juego y creen una dinámica de oferta y demanda en la que las NFT sean escasas y deseables por razones estéticas o de juego.
Ya sea un arma, un automóvil de lujo o incluso una tierra virtual, habrá nuevos incentivos en el juego con miras a controlar más de cerca el comportamiento de los jugadores y crear una economía que crezca de manera predecible y sostenible.
Así es como se ve en la práctica
Con armas, puedes probar diferentes estilos de juego. Un coche de lujo no solo será estético sino quizás más rápido que otros modelos. La tierra virtual te permite construir y ubica al jugador en un tiempo y espacio específico que le pertenece únicamente
También puede haber una buena razón para esperar múltiples monedas por juego. Uno se puede usar para la mecánica del juego, otro para las transacciones del mercado y otros para participar en sistemas de recompensas como el staking.
Esto no solo hace que la economía sea más predecible (las fluctuaciones son menos probables cuando una moneda única tiene menos exposición al riesgo), sino que abre el camino a la especulación de acuerdo con el papel de la moneda.
Una nueva ola de caídas de NFT puede devaluar un token de mercado o crear exageraciones e intensificar la sensación de escasez en torno a ediciones anteriores de NFT. Es posible que se anuncie un nuevo modo de juego, lo que llevará a los jugadores a crear una mayor demanda de la moneda principal del juego a medida que respondan al aumento potencial de la utilidad. Lo que es posible aquí es una economía versátil, robusta y rentable para que los participantes se comprometan.
En una próxima publicación, en la Parte 2 de este juego de visión del futuro, podremos ver cómo los juegos pueden facilitar un entorno en el que los derechos digitales se pueden hacer cumplir perfectamente.
El Metaverso, donde estaremos todos
Todas las potencias digitales de la Tierra están apostando fuerte a que los entornos multidimensionales virtuales sean la próxima iteración de Internet. Todos se están preparando, algunos más tímidamente, otros, con todo lo que tienen a mano.
Es difícil predecir exactamente lo que saldrá del ciclo actual, pero tanto las empresas como los inversores han realizado apuestas masivas, lo que significa que en los próximos años veremos cómo se desarrolla este asunto que promete ser inmenso.
¿Cómo se relacionan los NFT y el metaverso entre sí?
En pocas palabras, las NFT resuelven un problema similar al que resuelve Bitcoin: los objetos digitales, por la naturaleza de su diseño, son infinitamente replicables. Si tiene un modelo 3D de un Lamborghini, puede hacer 1.000 millones de Lamborghinis a un costo cercano a… cero.
Los tokens no fungibles, por otro lado, emitidos por la única entidad Lamborghini virtual verdadera, asociada de manera verificable con una sola instancia de un Lamborghini, brindan al propietario de la NFT el mismo nivel de exclusividad, aunque no funcionalidad, de un Lamborghini físico.
La funcionalidad de la NFT es inyectada en ella por Metaverse, el entorno que acepta la Lamborghini NFT y genera un objeto virtual con ciertas propiedades con las que el propietario y otros pueden interactuar.
Un metaverso proporciona un entorno literalmente infinito donde los NFT se pueden generar e implementar. Galaxias enteras, estrellas, continentes y megacorporaciones pueden tener sus derechos asignados a tokens no fungibles y ofrecidos al mejor postor.
En el escenario muy probable de múltiples metaversos AAA en competencia, los NFT que representan los derechos digitales de los medios y los objetos reconocidos por múltiples universos pueden tener mucho valor.
Poseer los derechos de películas y canciones en un entorno digital donde miles de millones de usuarios interactúan y generan regalías puede ser un negocio muy lucrativo. Lo que nos lleva al próximo gran cambio de paradigma que desencadenarán las NFT: los derechos digitales, que analizaré en la segunda parte de esta serie.
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