Tesla compró 1.500 millones de dólares en Bitcoin y entusiasmó a los mercados, pero algunos ven problemas en ello. Es el caso de Michael Burry, que se hizo famoso por predecir la crisis de 2008 como se escenificó en la célebre película de la gran apuesta.
El legendario inversor Michael Burry no ve con buenos ojos la compra de Bitcoin por 1.500 millones de dólares por parte de Tesla.
A pesar de haber entusiasmado a los mercados, la apuesta del primer fabricante de automóviles eléctricos por aceptar BTC como pago, en su opinión, podría ser una gran cortina de humo.
El director de Scion Asset Management se hizo conocido por ser el primero en predecir la burbuja financiera que condujo a la crisis de 2008. En su momento, incluso fue tildado de loco por los clientes de la entonces Scion Capital dada la magnitud de su apuesta.
Sin embargo, el riesgo resultó ser un beneficio de 700 millones de dólares para los inversores, y más de 100 millones para él mismo. Su historia cobró vida en los cines con la película de 2015 The Big Short (La gran apuesta, en español).
La publicidad es “confeti digital” para los problemas de Tesla en China, dice Michael Burry
Burry habría publicado en Twitter – posteriormente borrado – una crítica a la iniciativa de Tesla por la compra de Bitcoin. En su opinión, la medida sería una forma de esquivar a la opinión pública de los problemas reales a los que se enfrenta la empresa en China.
Los reguladores chinos denuncian a Tesla por problemas de calidad mientras los consumidores se quejan de la calidad… pero Tesla compró Bitcoin. En mi opinión, es demasiado confeti digital.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que Burry ha llegado a admitir en el pasado que tenía posiciones abiertas en corto con las acciones de Tesla. La estrategia es la misma por la que se dio a conocer cuando apostó contra el mercado de inversión inmobiliaria de Estados Unidos. Si las acciones de Tesla se deprecian, él se beneficia.
En este sentido, los problemas regulatorios de Tesla en China serían uno de los ingredientes de su proyección. Si el asunto llamara lo suficiente la atención de los inversores, por ejemplo, las acciones de la empresa podrían caer. La emisión de acciones, recordemos, es una de las razones por las que Tesla dejó de endeudarse más en los últimos años.
Para Burry, la estrategia de Elon Musk al comprar Bitcoin es provocar justo lo contrario: entusiasmar a los fans y hacer que las acciones de la compañía suban. En este sentido, el inversor considera que puede tener éxito.
El coeficiente de correlación de $TSLA y $BTC fue de 0,951967 en los últimos seis meses. ¿Está Elon Musk buscando la unidad perfecta? No, Elon sueña lo imposible. Está decidido a romper la unidad. Correlación > 1. Y tiene la historia de su lado. Los inversores de $TSLA y $BTC pueden hacer que todo suceda.
Bitcoin sigue al alza, pero Tesla se estanca
Tras la noticia de que Tesla había comprado Bitcoin, BTC se disparó y alcanzó un nuevo máximo de 43.000 dólares. Desde entonces, el activo mantiene la tendencia alcista y llegó a superar los 48.000 dólares en la mañana del martes, 9 de febrero, según Coingecko.
Las acciones de Tesla, por su parte, subieron de 793 a 872 dólares tras el anuncio. Sin embargo, el entusiasmo de los inversores se enfrió y, hoy, el activo sigue cotizando a 852 dólares.
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