En un momento crucial que podría recalibrar el futuro financiero del sector cripto, Digital Currency Group (DCG) ha firmado un acuerdo con los acreedores de Genesis.
Según documentos judiciales presentados el martes pasado, este acuerdo innovador responde a muchas de las complejas cuestiones legales que rodean la insolvencia de Genesis.
Digital Currency Group y Genesis llegan a un acuerdo
El plan de DCG describe un amplio espectro de pagos. Los acreedores quirografarios pueden recuperar entre el 70% y el 90% de sus reclamaciones en equivalentes de dólares. Las recuperaciones en bienes podrían oscilar entre el 65% y el 90%, dependiendo de la denominación del activo.
Sin embargo, es fundamental tener en cuenta que estas estimaciones dependen de las condiciones del mercado y de los términos finales del acuerdo.
Genesis se encontró en una crisis financiera cuando dejó de retirar dinero en noviembre pasado tras el colapso de FTX. Al optar por la protección por bancarrota a principios de este año, las tribulaciones de la empresa encendieron las alarmas en toda la industria de activos digitales.
DCG, en su correspondencia a los accionistas el mes pasado, insinuó que estaba a punto de resolver las intrincadas reclamaciones. La urgencia se vio alimentada por las responsabilidades inminentes de DCG.
Tenía aproximadamente 630 millones de dólares en préstamos no garantizados con vencimiento en mayo de 2023 y 1.100 millones de dólares pendientes en virtud de un pagaré no garantizado con vencimiento en 2032.
Conociendo el plan de pago
La estructura de pago acordada busca cumplir con estas obligaciones de manera eficiente. El plan divide los 1.100 millones de dólares en dos tramos. Comprende un pago de 328,8 millones de dólares con vencimiento a dos años y una porción de 830 millones de dólares con vencimiento a siete años.
Además, DCG enviará cuatro cuotas adicionales por un total de 275 millones de dólares para liquidar los inminentes vencimientos de mayo de 2023.
Genesis Global Holdco y sus subsidiarias entraron en la lucha por la bancarrota al presentarse ante el Tribunal de Bancarrotas de los Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York a principios de este año.
La documentación oficial reveló que Genesis debía la asombrosa cantidad de 3.500 millones de dólares a sus 50 principales acreedores.
Esto incluía entidades como el exchange de criptomonedas Gemini, el gigante comercial Cumberland y los innovadores financieros Mirana, MoonAlpha Finance y el New Finance Income Fund de VanEck.
El acuerdo representa no sólo un salvavidas para DCG y Genesis. Tambbién podría ser potencialmente un factor estabilizador para un mercado cripto volátil que ha estado plagado de incertidumbres.
Este caso es interesante y el resultado podría sentar nuevos precedentes para la regulación y recuperación de activos digitales.
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