El 9 de mayo ha sido un día clave para el presidente de El Salvador, Nayib Bukele. En medio de una sangría del mercado de las criptomonedas, el presidente decidió comprar 500 Bitcoin (BTC) por un precio promedio de 30 mil dólares por moneda, para así aumentar sus reservas de BTC a 2301.
Siguiendo a esta decisión, el presidente procedió a mostrar las primeras imágenes de lo que será la Bitcoin City, un proyecto millonario que se está desarrollando en El Salvador y que promete ser el paraíso centroamericano para las criptomonedas.
Con un tweet en donde decía que “La Bitcoin City va muy bien” el presidente Bukele mostraba al mundo los primeros planos de su proyecto. Estos están diseñados por el arquitecto mexicano, Fernando Romero, quien hasta el 2019 estaba trabajando en la construcción del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, pero se retiró del proyecto tras problemas con el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
Este proyecto se desarrollará en las faldas del volcán Conchagua y tendrá una inversión de 500 millones de dólares para su construcción. Hay que resaltar que Bukele busca que esta ciudad atraiga inversores y que su energía sea sustentada por toda la que se produce con el volcán, una práctica muy común en países volcánicos y que en Islandia ha servido para la minería de criptos.
Ahora bien, este proyecto ha tenido problemas. Y es que los recursos dependen de lo que suceda con los bonos Bitcoin, unos bonos sustentados en BTC que el gobierno salvadoreño busca sacar al mercado, pero que se ha encontrado con una serie de dificultades.
Esto ha hecho que mil millones de dólares en bonos se vean retenidos hasta nuevo aviso. Desde el gobierno se argumenta que esto se debe a la situación de la economía global que se ha empeorado con la guerra en Ucrania, pero muchos ven con preocupación que la apuesta por el Bitcoin esté perjudicando al país.
Aún así Bukele sigue firme. Horas después de comprar los 500 BTC y con un rebote en los precios de las criptos, el presidente puso un tweet en donde decía que si vendía los 500 BTC que había comprado tendría una ganancia millonaria, pero no lo haría por su confianza en la tecnología.
Hay que resaltar que Bukele siempre ha respondido a las caídas del mercado con mensajes esperanzadores y con una promesa de que en el futuro Bitcoin valdrá mucho más de lo que la gente cree, por lo que hay que esperar y no entrar en pánico.
Pero la realidad actual es que falta por ver cómo logra salir de los aprietos financieros en los que están metidos. Todo apunta a que la confianza en su plan sigue intacta.
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