Goldman Sachs pone en duda la renovación del mercado de valores de EEUU

El banco ajustó su pronóstico de tres meses en una nota de cliente del 29 de mayo reportada por Bloomberg. Los analistas de Goldman, encabezados por el estratega jefe de acciones de EE.UU. David Kostin, habían predicho previamente más ventas que llevarían al S&P 500 a un nivel de 2.400. Los estrategas de Goldman Sachs ahora anticipan una caída máxima al nivel de 2.750 y reconocen el potencial de un nuevo repunte a 3.200. El índice de referencia de las acciones de EE.UU. cerró en 3.044 el viernes. La reciente nota del cliente dice:

“El poderoso rebote significa que nuestro anterior objetivo de 3 meses de 2.400 es poco probable que se realice… El apoyo a la política monetaria y fiscal limita la probable caída a aproximadamente el 10%. El posicionamiento de los inversores ha oscilado entre neutral y bajo y es un posible catalizador del 5% de subida”.

Una venta masiva en marzo, impulsada por el hundimiento de los precios del petróleo en medio de la incertidumbre económica inspirada por el coronavirus, había causado una fuerte caída en los precios de las acciones de los Estados Unidos. Desde entonces, el mercado se ha recuperado en alrededor de un 36%. Mientras Goldman predice menos carnicería en el mercado de lo que se pensaba, JP Morgan Chase está empezando a inclinarse hacia la baja. En una nota del 28 de mayo, el Jefe Global de Estrategia Macro Cuantitativa y de Derivados, Marko Kolanovic, destacó que las tensiones entre los EE.UU. y China limitan el potencial alcista del mercado. A pesar del cambio en las previsiones a corto plazo de Goldman, el banco multinacional sigue manteniendo un objetivo de precio de fin de año para el S&P 500 de 3.000.