En apenas una década, la minería de criptomonedas ha dejado de ser una actividad prácticamente desconocida para convertirse en una profesión, aunque no está relegada a expertos. Incluso usuarios sin conocimientos pueden minar actualmente gracias a los servicios de cloud mining.
En esta guía, veremos en qué consiste la minería de criptomonedas, qué tipos existen y cómo minar según el caso. También resolveremos dudas sobre la legalidad, la rentabilidad y el consumo energético (y el impacto medioambiental) de la minería.
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¿Qué es la minería de criptomonedas?
La minería de criptomonedas es el proceso a través del cual se validan las transacciones y se añaden nuevos bloques a una blockchain. Es la base del algoritmo de consenso PoW, usada por Bitcoin y redes similares. Los encargados de llevar a cabo esta tarea son los mineros, resolviendo complejos problemas matemáticos.
El incremento de la complejidad de las ecuaciones a resolver implica un aumento de la inversión en recursos, un gasto que se ve compensado por la obtención de recompensas. Los mineros compiten entre ellos para conseguir los tokens que, a modo de compensación, se reciben tras la resolución de los problemas y la generación de bloques.
Los mineros representan una parte fundamental de la mayoría de ecosistemas cripto, aportando seguridad y estabilidad. También mantienen su funcionamiento desde una perspectiva descentralizada, aunque el costo de los equipos y la competencia con las compañías de minado son variables que impiden el acceso directo a la minería a muchos usuarios.
¿Cómo minar criptomonedas?
Aunque costosa, la minería de criptomonedas es una buena fuente de ingresos pasivos, siempre y cuando los incentivos sean realmente rentables. Antes de comenzar a minar, es conveniente calcular el impacto económico de todo el proceso.
La cuestión principal es si las recompensas cubren las pérdidas potenciales (por ejemplo, debido a la volatilidad), el costo energético o la inversión en equipamiento. Además, existen otros factores que pueden reducir el flujo de ingresos, como los gastos de mantenimiento o la falta de conocimientos a la hora de configurar los equipos.

1. Elige una criptomoneda
Para comenzar a minar, lo primero es elegir un proyecto en el que participar. No todas las criptomonedas requieren el mismo esfuerzo para ser minadas, especialmente por cuestiones como la competencia. Minar resulta más fácil y asequible cuando hay menos mineros trabajando.
En este sentido, minar BTC puede resultar prácticamente imposible para un usuario medio. Incluso para un minero con experiencia, puede resultar poco rentable: es complicado competir individualmente contra empresas dedicadas a la minería. Lo habitual es que, además de invertir grandes sumas de dinero en equipamiento, se unan a pools para aumentar las probabilidades de generar beneficios.
La mayoría de altcoins basadas en el mecanismo de consenso PoW ofrecen alternativas mucho más atractivas para comenzar a minar. En muchos casos, su potencial de crecimiento es mayor. En cuanto a la competencia, el poder computacional necesario y el costo energético, suelen ser menores.
No todo son ventajas. La volatilidad sigue siendo una cuestión a tener en cuenta, además del grado de seguridad, que puede ser sensiblemente inferior en el caso de proyectos nuevos. La exposición a hacks y fallos es mayor, lo que supone un riesgo superior a la hora de invertir en recursos para minar.
2. Elige tu equipo de minería
La competencia es uno de los factores que define a la minería. En este sentido, disponer de equipos potentes supone una ventaja. Los mineros suelen elegir hardware ASIC para aumentar las probabilidades de generar bloques, aunque las GPU siguen siendo efectivas en algunas redes.
Para obtener ciertas criptomonedas, se requiere el uso de equipos especializados en condiciones específicas, como es el caso de Helium. Es importante elegir una criptomoneda que se amolde a nuestras necesidades y expectativas antes de invertir en equipamiento.
3. Elige un monedero
Para gestionar los activos que obtengas, necesitarás un monedero. Hay múltiples opciones. Coinbase y Nexo son dos buenos ejemplos de wallets sin custodia.
Si optas por monederos de hardware Ledger, Trezor y Safepal son las principales opciones.
4. Configura tu dispositivo de minería
Para minar, es necesario descargar programas especializados. La mayoría de proyectos ofrecen sus programas de minería de forma gratuita. Siempre es aconsejable bajar el software desde el sitio oficial de la criptomoneda, además de investigar sobre el mismo antes de instalarlo y usarlo.
La configuración del dispositivo es importante, especialmente en cuestiones básicas como el consumo energético. El gasto en electricidad puede llegar a superar los ingresos si no se realiza un estudio previo, incluyendo una estimación aproximada del costo asociado a la energía necesaria para minar.
Otros detalles a tener en cuenta, es el calor y el ruido. En este sentido, las compañías de minería prefieren localizaciones aisladas con climas fríos (por ejemplo, zonas del interior de Islandia). En el caso de mineros individuales, la refrigeración es esencial, así como la insonorización (si los equipos se encuentran en entornos domésticos).
5. Únete a un pool
Los mineros compiten con las compañías de minería uniéndose a pools, cuyo acceso suele tener asociado una pequeña comisión. Por libre, tienen pocas probabilidades de generar beneficios, ya que su poder computacional es ínfimo en comparación con el de las empresas especializadas en minería.
Los pools de minería combinan el poder computaciones de todos los participantes, aumentando la probabilidad de generar bloques. Estos espacios cuentan con un coordinador que optimiza el funcionamiento, basado en el reparto de las recompensas según los recursos aportados por cada minero.
Tipos de minería

CPU
Una CPU es un componente electrónico que aporta poder de procesamiento a los dispositivos electrónicos. El software de minería para CPU es efectivo para un hash rate de hasta 10MH/sec. Se trata de una cifra que Bitcoin supera significativamente a día de hoy, por lo que minar BTC con CPU no es para rentable.
Más allá de Bitcoin, hay criptomonedas que sí merece la pena minar de esta manera, incluso de forma independiente. Por supuesto, unirse a un pool también es posible, aunque las necesidades de poder computacional sean menores.
Para configurar un equipo de minería basado en CPU, lo recomendable es utilizar el procesador más potente que se pueda adquirir. Uno de los detalles a tener en cuenta es el número de núcleos e hilos, ya que tendrá un impacto directo en la velocidad del equipo.
GPU
Como hemos comentado, la minería con CPU resulta poco rentable en muchos casos. Para minar BTC, existen otros tipos mucho más eficaces. Las tarjetas gráficas comenzaron a usarse en octubre de 2010 (cuando se lanzó el primer programa específico para GPU) como recurso para aumentar el poder computacional de los centros de minería.
Con el paso de los años, el software de minería GPU se ha mejorado gracias al trabajo de desarrolladores vinculados a proyectos de código abierto. Actualmente, el rendimiento de este tipo de minería supera los 20 KH/s. Muchos mineros aumentan la potencia de salida montando sistemas con múltiples GPU.
FGPA
La minería GPU es eficaz, pero ineficiente. El coste del los equipos de minería basados en tarjetas gráficas es elevado. Aquí entran en juego los FPGA. Son circuitos programables que pueden configurarse para realizar tareas específicas. Minar criptomonedas es una de ellas.
Los equipos de minería FGPA, no solo reducen el costo a medio y largo plazo, también aumentan las probabilidades de generar ingresos. Son más rápidos que los equipos CPU y GPU a la hora de realizar cálculos, alcanzando los 25,000 MH/s de hash. Además, consumen mucha menos energía.
ASIC
La popularidad de la minería FPGA fue corta, eclipsada por la llegada de los equipos basados en chips ASIC. Estos dispositivos están especializados en la minería de criptomonedas PoW, ofreciendo un rendimiento mucho mayor, especialmente en el caso de la minería a gran escala.
La minería ASIC es la responsable del aumento significativo del hashrate de la red Bitcoin, abriendo una brecha entre los mineros ASIC y los que trabajan con equipos GPU o CPU. El uso de dispositivos ASIC por parte de compañías también ha dificultado el acceso de mineros independientes que no pueden competir en igualdad de condiciones.
El costo elevado de los equipos ASIC es el principal problema, que esconde otra cuestión mucho más preocupante en el caso de Bitcoin. Al competir de forma brutal con los mineros independientes comprando más equipos ASIC, las compañías de minería ponen en riesgo la descentralización de la red.
Cloud mining
Una opción para minar sin comprar el equipamiento necesario es el cloud mining. Es una forma indirecta de mina, alquilando dispositivos de minería. La inversión se realiza a través de plataformas, firmando contratos temporales en función del capital aportado, el retorno esperado y otras variables.
Se trata de un tipo de minería con un costo reducido, mucho más accesible cuando el precio del activo (BTC mayormente) es bajo, reduciéndose las cuotas mensuales por el alquiler del equipo. Cabe destacar que, en última instancia, el proceso depende del proveedor del servicio, por lo que es muy importante realizar una investigación previa.
¿Cómo comenzar a minar?
Fundada en 2017, ECOS es una de las principales plataformas de minería en la nube con más de 90,000 usuarios en todo el mundo. Ofrece contratos de alquiler de equipos desde 150 dólares, cuyo retorno se puede estimar con una calculadora específica disponible en la web oficial. Usa ESTE LINK para comenzar a minar BTC con un mes gratuito.
¿Es legal minar criptomonedas?
De entrada, si Bitcoin es legal (o alegal), la minería de BTC también debería serlo. En la práctica, la minería de criptomonedas no cuenta con una regulación estandarizada y, aunque está permitida en la mayoría de los países, no cuenta con el beneplácito de las autoridades en todos.
En algunos lugares, se persigue; en otros, se fomenta. Antes de minar, es aconsejable informarse sobre la legislación que afecte a la minería en el país o estado de residencia. Igualmente, es conveniente investigar qué cargas impositivas tienen los beneficios generados con esta actividad.

¿Es rentable la minería?
Aunque el aspecto económico suele destacar cuando se habla de minar criptomonedas, lo cierto es que la minería juega un papel muy importante en cualquier ecosistema PoW. En una blockchain totalmente descentralizada, los mineros garantizan la estabilidad y la seguridad la red.
Si nos centramos exclusivamente en la generación de beneficios, la minería es una actividad que implica gastos considerables, mayormente en energía, equipo y software. Minar no está exento de riesgos. Tampoco hay que desestimar el esfuerzo y el tiempo que hay que dedicar a la formación y la investigación.
Los mineros pueden optar por vender sus recompensas o mantenerlas. En cualquier caso, hay diversos factores que influyen en la rentabilidad de la minería. Ciertamente, el precio del activo es uno de ellos, pero los costos asociados al consumo energético, así como a la compra y mantenimiento de los equipos también es determinante.
Preguntas frecuentes
¿Se puede minar criptomonedas en casa?
¿Se puede minar criptomonedas con el ordenador?
¿Se puede minar con el móvil?
¿Hay que pagar impuestos por la minería?
¿Es la minería mala para el medio ambiente?
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