El PSOE retomará su documento que entregó al Pleno desde junio pasado, donde expone la necesidad de que los bancos centrales europeos apuesten por el euro digital, principalmente por motivos de inclusión financiera y para frenar el paulatino uso del dinero en efectivo.
El Pleno del Congreso debatirá el 14 de diciembre la propuesta del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) en Sesión Plenaria sobre la creación de un “euro público digital”, relativa al impuesto de un grupo de estudio sobre la implantación del euro digital como moneda pública digital.
La propuesta del PSOE será debatida por todo el Congreso sobre si Europa debería o no adoptar el euro digital como moneda de curso legal, así como el paulatino menor uso del dinero en efectivo, el auge de las criptomonedas y las políticas monetarias.
Al igual que la Unión Europea, el gobierno español también colabora con un grupo de expertos para estudiar el desarrollo de un euro digital, con el que buscan anteponer la estabilidad financiera de la eurozona, el bien público y “bajo un control democrático”.
Previamente, el Banco de España publicó sus “Avances en la agenda estratégica del euro digital” donde sostiene que hay un progresivo menor uso de dinero en efectivo, lo cual podría terminar afectado el papel de los bancos centrales, por lo que una moneda digital preservaría el papel del dinero del banco central.
El euro digital sigue generando conversación en España
Aunque se desconoce el enfoque se la Sesión Plenaria sobre el euro digital o los temas que debatirán, lo cierto es que el Pleno retomará la discusión que inició el PSOE desde junio pasado, cuando presentó su documento “Exposición de motivos”, donde sostiene que el euro digital es una alternativa pública frente a los sistemas de pago.
El PSOE presentó desde junio sus argumentos para crear una conversación sobre el euro digital, pero a favor de las CBDC, apuntando que el dinero digital implicaría la recuperación del dinero “como bien público”, más estable y bajo estricto control democrático al ser impulsado por un banco central.
Así lo expuso el PSOE en su momento:
“El dinero digital no implica ni la nacionalización del sistema bancario ni la estatalización del crédito. En las distintas variantes que se plantean, desde una CBDC directa, con cuentas abiertas directamente en el banco central, hasta otras modalidades híbridas o intermediadas, la actividad privada de crédito no desaparece”.
Asimismo, el partido español reveló que más del 80% de las instituciones financieras consultadas por el Banco de Pagos Internacionales de Basilea, revelaron ya estar trabajando en proyectos de “CBDC”, citando nuevas modalidades de pago, la competencia que representan las criptomonedas y cómo operan de forma ajena a los bancos, la inclusión financiera y el declive del uso del efectivo.
El PSOE muestra duda, pese a sus argumentos positivos sobre las CBDC:
“En cualquier caso, el dinero público digital es una realidad aún en ciernes que necesita ser investigada y evaluada con detenimiento, estudiando pros y contras de las distintas modalidades que se plantean. Una realidad que ni España ni el resto de las economías de la eurozona deberían obviar. Una realidad en la que el Banco Central Europeo ha de tener un rol destacado”.
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