Empresarios establecidos en Argentina se suman a la tendencia de incluir las criptomonedas como método de pago para botellas de vino, e incluso lanzaron un token despaldado por la producción de “Costaflores”.
Empresarios que iniciaron hace cinco años la producción de vino en Mendoza, Argentina bajo el proyecto “Costaflores” buscan ahora consolidad las transacciones de vinos mediante criptomonedas, ya que su modelo OpenVino impulsará a las bodegas a emitir su propio token, el cual estará respaldado por botellas de vino.
El proyecto OpenVino permitirá pagar los servicios en criptomonedas, pero solo para las bodegas de “Costaflores”, modelo que buscan expandir incorporando más bodegas, como sus fundadores lo revelaron al diario Mendoza Post.
Al respecto, el mentor del proyecto Mike Barrow resaltó:
“Soy Mike Tango Bravo, informático de Estados Unidos, que comencé en el mundo vitivinícola comprando un terreno en Perdriel -Luján de Cuyo- y plantando viñas de Malbec, Petit Verdot, y Cabernet Sauvignon en el 2003. El proyecto se llama Costaflores. (costaflores.com)”.
Previamente, la industria del vino ya había experimentado con las criptomonedas, pues en 2021, empresarios de la industria vitivinícola de España lanzaron la iniciativa “Viña Satoshi”, donde señalan que aceptarán Bitcoin como método de pago para impulsar a los pequeños proveedores del sector. El proyecto arranca con la bodega “Pago de la Boticaria”.
Empresarios vitivinícolas quieran sumar a más bodegas de vino
De acuerdo con el diario Mendoza Post, Mike comenzó en 2007 sus primeros cortes de uva que denominó “Costaflores Organic Vineyard”, mientras que el proyecto OpenVino nació hace cinco años, pero con la idea de integrar nuevas tecnologías en la producción, como blockchain, criptomonedas y hasta Internet de las Cosas (IoT).
El sitio web de Costaflores resalta que uno de sus primeros criptoactivos respaldado por el vino son MTB21, el cual tiene un respaldo totalmente orgánico y está basado en ERC20 para la cosecha 2021, mientras que cada token digital representa una botella de vino producido a partir del año pasado y disponible para beber después del 6 de mayo de 2024.
En tanto, Mike ahondó:
“Estamos viviendo un momento fascinante de la creación de nuevos modelos de negocio con las criptomonedas y blockchain. Argentina es uno de los países más avanzados en estas tecnologías, y nosotros somos los primeros en aplicarlo al mundo del vino. Vamos a llevar a estas tecnologías a todas las regiones vitivinícolas del mundo y Mendoza es pionero en este espacio”.
A finales de 2020, IBM lanzó VinAssure, la primera plataforma blockchain enfocada en rastrear el proceso de distribución de vino en España. La plataforma fue creada en conjunto con eProvenance, una compañía especializada en el análisis y monitoreo de condiciones para el envío de vinos.
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