Con la llamada “Operación Militar Especial” en Ucrania, algunas de las principales economías mundiales, incluidos Estados unidos, Reino Unido, Japón y la Unión Europea, impusieron sanciones a Rusia. En consecuencia, lo que lleva a que algunos servicios internacionales detengan sus operaciones en el país invasor.
Después de que el presidente Vladimir Putin iniciara una operación militar en Ucrania el 24 de febrero, el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, impuso sanciones económicas y diplomáticas a Rusia.
Como resultado, algunas empresas están expuestas a cumplir con los boicots y deben suspender sus operaciones en Rusia, incluido el proveedor de servicios de transferencia de dinero, SWIFT. Dmytro Kuleba, ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania tuiteó:
“Todos los que ahora duden de si se debe prohibir a Rusia [el servicio] SWIFT deben entender que la sangre de hombres, mujeres y niños ucranianos inocentes también estará en sus manos. PROHIBIR A RUSIA [EL USO] DE SWIFT”.
La Society for Worldwide Interbank Financial Telecommunication (SWIFT) es un servicio transfronterizo de transacciones monetarias con sede en Bélgica fundado en 1973 y que conecta a más de 11,000 bancos y 200 países.
Aunque Rusia tiene una alternativa a SWIFT, llamada SPFS, que ha estado en desarrollo desde 2014, todavía no puede operar con la misma eficacia que la firma belga. Esto provocó transacciones más lentas y costosas, incluso con algunos de los países amigos de Rusia, como China.
“Los aliados se comprometieron a eliminar bancos rusos ‘seleccionados’ de SWIFT. Este es un buen movimiento. Significa que los aliados unirán las sanciones de bloqueo con prohibiciones específicas de SWIFT”, dijo Eddie Fishman, experto en economía y miembro del Centro Eurasia del Consejo Atlántico:
“Solo los bancos sancionados serán bloqueados de SWIFT. No será una prohibición general de SWIFT”.
Criptomonedas como la mejor alternativa
Estados Unidos todavía está preocupado por el giro de Rusia hacia las criptomonedas. Aunque algunos exchanges centralizados importantes de criptomonedas, incluidos Coinbase, Gemini y Binance, le han dicho a Bloomberg que cumplen con las sanciones internacionales, pero los rusos aún pueden usar exchanges descentralizados y monederos sin custodia.
Dado que el dólar estadounidense es la moneda de reserva del mundo, estas sanciones tendrán un fuerte efecto en el comercio internacional de Rusia. Por lo tanto, el único camino para evadir las sanciones es usar criptomonedas sin el dólar estadounidense.
Rusia, además, ha estado desarrollando su propia moneda digital del banco central (CBDC), llamada rublo digital, que operará como una criptomoneda pero de manera más centralizada. El proyecto fue anunciado en octubre de 2020.
Se esperaba que el piloto del rublo digital fuese lanzado poco después de completarse su prototipo en diciembre del año pasado.
Según el medio ruso Tass, el piloto de la moneda digital rusa se lanzaría con la participación de 12 bancos a principios de 2022. El proyecto CBDC permitirá que Rusia sea menos dependiente del dólar estadounidense, o incluso evadir sanciones.
Amistad ilimitada
El líder chino, Xi Jinping, ya mencionó que su asociación con el presidente ruso “no tiene límites”. Sin embargo, China está un paso por delante de Rusia en lo que respecta a una moneda digital nacional.
China lanzó en enero su piloto de cbdc, el yuan digital, con una aplicación móvil llamada e-CNY, disponible tanto para iOS como para Android. El país más poblado del mundo prohibió la minería de criptomonedas para abrir las puertas a su moneda digital centralizada.
Según SCMP, la aplicación e-CNY tuvo más de 13,800 millones de dólares en transacciones con 261 millones de usuarios únicos.
Una de las razones principales del lanzamiento temprano del yuan digital era la facilitación de transacciones antes de los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing. Los mil millones de usuarios de la aplicación WeChat ahora pueden comprar y usar yuanes digitales, según Investopedia.
Rusia, sin embargo, puede usar el Sistema de pago interbancario transfronterizo (CIPS) de China junto con la aplicación de pago digital, e-CNY, para huir con las sanciones. El objetivo principal de CIPS era ayudar a que el yuan se utilizara en transacciones internacionales.
Según Reuters, CIPS experimentó un aumento del 75% en las transacciones totales en 2021, alcanzando los 80 billones de yuanes (alrededor de 12,8 billones de dólares estadounidenses). CIPS es utilizado por “30 bancos en Japón, 23 bancos en Rusia y 31 bancos en naciones africanas”.
Sin olvidar que China y Rusia tienen una relación muy amistosa, y no es de extrañar que Putin se dedique por completo al sistema de pago chino. Aunque el CIPS confía en SWIFT, los números muestran su potencial para “operar de forma independiente”.
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