“Petro no tiene salida internacional”, asegura especialista venezolano

En declaraciones para el periódico venezolano “El Universal”, Caraballo afirmó que el token “no genera confianza para convertirse en criptomoneda”. Una de las razones que causa desconfianza radica, a su parecer, en el hecho de que es vendido como moneda, pero está respaldado por un colateral muy volátil como lo es el Petróleo:

“El punto más importante es que ataron el Petro al precio del oro y, esencialmente, al petróleo. Este último pertenece a un mercado que no tiene nada que ver con lo que es la naturaleza de un criptoactivo. Entonces, buscaría redefinir los elementos que no están permitiendo que pueda fluir de una manera normal, por ejemplo, esa atadura que tiene con el mercado petrolero, que es muy cambiante”

Las palabras de Caraballo toman especial relevancia si se considera que, durante los últimos días, el valor del barril de petróleo ha sufrido una caída histórica, y en un país donde el salario mínimo mensual se encuentra cara a cara con la línea de pobreza extrema, tal variación resulta insoportable para un ciudadano que dependa de un ingreso salarial en estas condiciones. Caraballo explicó que al menos frente al bolívar tradicional, el criptoactivo podría generar una impresión de transparencia y seguridad, sin embargo, existen algunos aspectos que empañan esa imagen —sobre todo vinculados a la falta de transparencia con la que el gobierno ha manejado el proyecto últimamente.

“En Venezuela, al ser una red privada donde el mismo gobierno es quien tiene la posibilidad de ver las transacciones, porque no son de carácter público, eso hace también que haya cierta suspicacia con el manejo de esas transacciones que están cayendo en esas redes del Petro”

¿Adopción u obligación?

Así mismo, explicó que, a diferencia del resto de criptomonedas, el uso del Petro no está asociado a un gusto natural o a una preferencia del consumidor, sino que se ha extendido porque el mismo gobierno ha creado mecanismos para forzar su adopción. “no sabes que hacer con la moneda, nadie la quiere, no hay demanda… No hay un intercambio libre y comercial para la moneda”, sentenció. A pesar de las palabras de Caraballo, es importante destacar que en Venezuela sí existen plataformas de intercambio de criptomonedas que tienen listados pares de trading del Petro frente a otros ítems como Bitcoin, Euro y Bolívar soberano, sin embargo, también hay que aceptar que la liquidez es todavía baja.

Caraballo explicó así mismo que debido a las sanciones unilaterales impuestas por el gobierno de los Estados Unidos al pueblo de Venezuela, es muy difícil que el Petro consiga una aceptación internacional. Desde su punto de vista, la criptomoneda venezolana se encuentra en un callejón sin salida, y con pocas posibilidades aparentes de conseguir una salida.

“Al Petro no se le ve salida internacional ya que no tiene ningún tipo de circulación extranjera. Eso constituye una limitante”.

Parece que por ahora, la famosa criptomoneda venezolana no tiene otro futuro mas que seguir luchando por ganarse un lugar en el ecosistema de traders y entusiastas de las tecnologías blockchain… Pero para eso primero debe ganarse el corazón de los venezolanos, y eso no se logra a la fuerza.