Kyrgyzstan se alista para lanzar una stablecoin denominada en dólares pero respaldada por sus considerables reservas de oro.
Los analistas argumentan que este movimiento socava los esfuerzos de Washington por impulsar el dominio del dólar utilizando stablecoins para aumentar la demanda de bonos del Tesoro de los Estados Unidos. También lo ven como un posible caso de prueba geopolítico para los países que buscan eludir las sanciones americanas.
SponsoredUSDKG se presenta con una emisión de 50 millones de dólares
El regulador financiero de Kirguistán anunció el miércoles el lanzamiento de su stablecoin nacional, USDKG, con una emisión inicial valorada en más de 50 millones de dólares.
A diferencia de las stablecoins tradicionales, USDKG está vinculada al dólar pero respaldada por reservas de oro físico, convirtiéndola en la primera stablecoin de su tipo en el mundo. La decisión de Kirguistán de respaldar su nueva stablecoin con oro se debe a las grandes reservas del país.
El Banco Central actualmente posee alrededor de 340 toneladas de oro, mientras que las exportaciones alcanzaron aproximadamente 16 toneladas en 2024. Las prospecciones geológicas también sugieren más de 1,000 toneladas de reservas confirmadas bajo tierra.
Al respaldar su stablecoin con oro en lugar de bonos del Tesoro de los Estados Unidos, Kirguistán obtiene una ventaja estratégica. Puede usar USDKG para mantener pagos transfronterizos y apoyar el comercio internacional fuera del control estadounidense.
En este contexto, es probable que los Estados Unidos vean el desarrollo con gran preocupación.
Sponsored SponsoredUn golpe contundente para EE.UU. y sus planes de stablecoins
Kirguistán es un aliado cercano de Rusia y se encuentra firmemente dentro de la esfera de influencia oriental. Varios bancos de Kirguistán han enfrentado sanciones relacionadas con SWIFT por parte de los Estados Unidos, lo que ha restringido su acceso a las redes tradicionales de pagos transfronterizos.
Como resultado, el país sigue el camino de naciones como Rusia y China, explorando las stablecoins como un medio alternativo para facilitar transacciones transfronterizas y sostener el comercio internacional.
Su solución, USDKG, es una alternativa muy valiosa, una que probablemente no pase desapercibida para los Estados Unidos.
Sponsored SponsoredEl presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este año la GENIUS Act con un objetivo claro en mente: reducir el valor de cambio del dólar mientras refuerza su papel como el principal sistema de pago del mundo.
Sin embargo, cuando una stablecoin está respaldada por oro en lugar de dólares, socava efectivamente el intento de Washington. La stablecoin utiliza el nombre del dólar por credibilidad y distribución, pero no aumenta la demanda de activos basados en dólares como los bonos del Tesoro.
Igual de importante es el hecho de que el oro no puede ser sancionado o congelado por los Estados Unidos. Aparte de las sanciones existentes que Estados Unidos impone a países adversarios, sus otras opciones son limitadas.
Sponsored¿Un nuevo sistema financiero a prueba de sanciones?
Una de las principales preocupaciones de Washington sobre USDKG es que otros países podrían seguir el ejemplo de Kirguistán.
El criptoanalista Ryan Adams señaló que naciones más grandes, como India, China y Brasil, podrían pronto lanzar sus propias stablecoins respaldadas por oro.
A diferencia de Tether, si los gobiernos soberanos emiten stablecoins, Estados Unidos tendría menos influencia. Podría presionar directamente a esos gobiernos o dirigir a la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) para sancionar monederos que contengan USDKG o activos similares.
Sin embargo, tales medidas solo bloquearían transacciones en exchanges centralizados, como Coinbase. Tendrían poco o ningún efecto sobre stablecoins utilizadas en redes descentralizadas o DeFi, así como a través de transacciones entre pares.
Dadas estas circunstancias, las stablecoins no respaldadas por bonos del Tesoro de los Estados Unidos proporcionan a los rivales de América una alternativa práctica y efectiva, socavando simultáneamente los objetivos de Washington para una economía basada en stablecoins.