Justicia descentralizada ¿Una realidad con Blockchain?

¿Será posible imaginar un sistema de justicia donde no haya corrupción, retardos procesales, pruebas viciadas ni abogados que pretendan cobrar más dinero del que vamos a tener en nuestra vida? Seguramente es un escenario muy difícil de creer. Sin embargo, en medio de la acelerada digitalización por la que nuestro mundo está pasando, es posible que la sociedad se detenga a pensar en la necesaria reforma por la que necesita pasar el sistema judicial.

¿Puede la tecnología Blockchain aportar algo?

Desde el año 2017, la palabra “Blockchain” ha sido vendida como una panacea universal. La industria ha querido agregar la Blockchain a todo, pero los resultados no han sido del todo positivos. Sin embargo, en el ángulo de la justicia, la regla del “fiasco de la tecnología Blockchain” no se puede aplicar a todo y particularmente dos proyectos dentro de la red pueden dar “bona fide” (buena fe en latín) de que la tecnología puede ayudar a construir un mejor sistema judicial, o al menos uno que corrija alguno de los errores que comete el tradicional. Kleros por un lado y las Cortes de Aragón por el otro, han demostrado como la Teoría de Juegos, los puntos de Schelling y la tecnología pueden construir un sistema de justicia descentralizado y eficaz. Para entender la relación entre la justicia y la Blockchain, consultamos a Federico Ast, CEO de Kleros para así entender por qué se hace necesaria esta unión. Según la opinión del natural de Argentina, la unión era un “paso necesario” en medio de la economía mundial que se está formando hoy en día entre el internet y las criptomonedas. Ast plantea que precisamente con el surgimiento de este nuevo mercado global, en donde todo se mueve más rápido y menos burocrático, se hace necesario un sistema que pueda resolver disputas dentro de precisamente esa economía internacional y sin fronteras que se está formando.

¿Cómo opera la justicias descentralizada?

A pesar de que digamos que es un sistema digital, no estamos hablando de un sistema de justicia de robots. De forma muy resumida, podemos mencionar que los protocolos de estos sistemas permiten que jurados, personas comunes y corrientes, voten en medio de las distintas disputas que se presentan dentro de la plataforma. ¿Y cómo se hace para ser jurado? Las personas se registran en los “tribunales” y apuestan tokens. No es necesario una profesión o una nacionalidad en específico para participar dentro de los procesos. Pero, ¿Qué tienen que ver los tokens en todo esto? Aquí es donde entra la teoría de juegos y los puntos de equilibrio. Los tokens permiten que los jurados tengan algo que ganar (o perder) en medio de la disputa que están decidiendo. El proceso permite que una parte de los tokens apostados por los jurados se mantenga en una cuenta hasta que se tome una decisión sobre el caso apostado. En una aplicación de precisamente la teoría de juegos, la suma de los tokens apostados se repartirán entre los jurados que tomen la misma decisión que tomó la mayoría. Es decir, las personas que ejercen como jurados no deben votar por lo que ellos particularmente consideren justo, sino por lo que crean que la mayoría de las partes involucradas pensarán que es justo. La suma de los tokens apostados se repartirán entre los jurados que tomen la misma decisión que tomó la mayoría, utilizan la teoría del juego. Es una especie de punto de equilibrio que busca eliminar la subjetividad de la justicia por medio de la decisión de la mayoría. Además, con este sistema se evita que los jurados puedan ponerse de acuerdo respecto a que decisión tomar, puesto que siempre cabe la posibilidad de que las partes no cumplan con lo acordado, tal y como plantea el popular Dilema del Prisionero.

¿Por qué confiar en justicia descentralizada en lugar de justicia centralizada?

Para ampliar esta pregunta, consultamos con Federico, quien volvió a insistir que la justicia tradicional puede presentarse como inoperativa para los casos internacionales más pequeños, aquellos en donde el arbitraje internacional no tiene cabida. Casos de e-commerce, de Crowdfunding, de ICOs, son idóneos para resolverse por un sistema blockchain. Al ser un sistema de justicia en un blockchain, explica Ast, el problema puede resolverse como si fuera una DAO, en donde todos los pasos del sistema pueden ser auditados y no modificados por nadie. La elección de los jurados, la evaluación de las pruebas y la decisión, toda esa data en la Blockchain para asegurar que todo permanezca transparente y seguro. Sin embargo, Ast resaltó que no hay una competencia entre la justicia descentralizada y la tradicional, sino que la primera está hecha para casos que no tienen cabida dentro de la segunda. Según su opinión, la justicia tradicional no va a ser reemplazada para los casos criminales o los juicios de mayor valor. Sin embargo, para los casos internacionales de menor valor en medio de la globalización que vivimos, si hay un campo interesante.

¿Tiene validez legal la justicia descentralizada?

Más allá del alcance y la utilidad que pueda tener la justicia descentralizada, es importante que nos preguntemos si la misma tiene validez legal. Para comprender sobre este tema, recurrimos nuevamente a la opinión de Ast, quien en primer lugar nos dijo que esto es “un campo abierto que se está definiendo”. En estos sistemas se le da prioridad a la voluntad de las partes para someterse a este tipo de procedimientos legales, lo que jurídicamente se denomina como Principio de la Voluntad de las Partes. Ast mencionó que las decisiones descentralizadas tienen una validez similar a la del arbitraje internacional, donde su validez también se rige por lo que determine la voluntad de las partes involucradas.