La Europol anunció la detención de un australiano de 34 años de edad, responsable del mercado ilegal más grande de la Darknet, conocido como “DarkMarket”.
La noticia fue publicada por la Europol el 11 de enero. El australiano del cual hasta los momentos se desconoce su nombre ya que los fiscales no compartieron esa información, operaba cerca de la frontera de Alemania con Dinamarca.
En dicho lugar fue llevada a cabo la operación de captura donde las fuerzas policiales lograron apagar y confiscar más de 20 servidores que servían para mantener el sitio web operativo.
DarkMarket movió más de $170 millones mediante BTC y XMR
Según las declaraciones, en el DarkMarket (que contaba con más de 2.400 proveedores al momento de su cierre), se habían efectuado al menos “320.000 transacciones” pagadas en su mayoría mediante criptomonedas como Bitcoin y Monero por un total aproximado de 140 millones de euros (más de 170 millones de dólares).
Entre las actividades ilícitas que se realizaban en el sitio web está el comercio de estupefacientes, la venta de datos de tarjetas de débito o crédito y DNIs, compra y venta de softwares pirata, papel moneda, tarjetas SIM anónimas, entre otras.
El “mercado ilegal más grande en la DarkNet” como le llamaron los fiscales, movía más de 4.650 BTC y 12.800 XMR (el token de Monero) una de las criptomonedas preferidas por los criminales gracias a sus funciones de privacidad (que le han ocasionado un fuerte ataque por parte de los entes reguladores como respuesta a este tipo de actividades ilegales).
La incautación de los servidores permitirá la captura de más criminales
Esta investigación tuvo una duración de 4 meses y contó con la participación de diversas fuerzas policiales internacionales de EE.UU como el FBI o la DEA, la policía nacional de Australia, Gran Bretaña, Dinamarca, Suiza, Ucrania y Moldavia e incluso efectivos de la Europol que coordinaron la investigación.
Sin embargo, es solo el comienzo de lo que podría significar una operación de captura a gran escala de usuarios de la DarkNet, ya que ahora las fuerzas policiales cuentan con una evidencia que les permitirá rastrear las más de 320.000 transacciones que se realizaron a través del DarkMarket.
Así lo indicaron los investigadores, quienes ahora tendrán la tarea de rastrear los datos de los usuarios almacenados en los servidores incautados para dar con sus capturas. Esta nueva operación les podría llevar semanas e incluso meses.
Si bien, las criptomonedas fueron creadas para ofrecer una libertad económica y una independencia bancaria, la privacidad que algunas ofrecen como su punto fuerte, han hecho que aumente el interés en ellas por parte de los criminales para cometer actos delictivos como lavado de dinero, extorsión etc.. Colocándose en la mira de los entes reguladores y otros jugadores dentro del ecosistema.
Quizá esta detención sirva de ejemplo para todas las personas que piensan que por usar criptomonedas nunca serán rastreados
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