Colombia vende 66% de sus reservas de oro antes de alcanzar máximos históricos

La máxima autoridad bancaria de Colombia ha anunciado esta semana que ha salido de un 67% de los lingotes de oro de la nación, obteniendo un total de 475 millones de dólares por la venta. Lamentablemente, la venta se coordinó en junio, semanas antes de que el metal precioso llegara a los máximos históricos en sus precios que mostró recientemente. Según mencionaron las autoridades colombianas a un diario local, la venta de este metal dorado se hizo en base “los resultados del ejercicio de optimización” por medio del cual las autoridades colombianas vigilan las tasas de interés y la volatilidad de los activos para lograr así precisar los activos que se mantendrán dentro del portafolio de la nación colombiana. No obstante, hay que mencionar que Colombia nunca ha sido un país que confíe ampliamente en el oro como un valor refugio para sus reservas internacionales. Según se reporta en los informes del Banco de la República, para este momento el oro representa apenas un 0.4% de las reservas internacionales de la nación cafetalera. La porción más importante de las reservas colombianas se encuentra en Títulos del Tesoro de los Estados Unidos. La afinidad por los Títulos americanos no es un secreto, de hecho, el Banco de la República llegó a publicar hace menos de un mes un informe titulado “¿Cuáles podrían ser las razones para que en las reservas internacionales la participación del oro sea baja?” en donde llegaron a afirmar:

Considerando lo anterior, se advierte que el precio del oro se caracteriza por una alta volatilidad y por presentar variaciones de hasta 30% en un año, mientras que los precios de los bonos del gobierno de países desarrollados registran una volatilidad mucho menor.

¿Qué podría haber impulsado este movimiento?

En medio de una situación económica en donde todos están acumulando oro (incluyendo a Warren Buffet, quien no es fanático del metal dorado) ante la incertidumbre que pudiera estar aconteciendo, Colombia pareciera estar actuando en “contra sentido” y ha vendido una gran porción de sus posesiones de oro. La versión oficial brindada de que los estudios de los expertos del banco determinaron que el oro no aseguraba buenos rendimientos para el portafolio pudiera quedar trastocada después de ver como el metal precioso subió de precios tan solo semanas después de la venta que coordinaran las autoridades colombianas. Otro supuesto que pudiera destacarse más allá de la idea de los bajos rendimientos del oro es que la nación se encuentra en búsqueda de liquidez en dólares estadounidenses para afrontar pago de deuda externa u otras obligaciones propias de la Administración. Recordemos que, como mencionamos anteriormente en BeInCrypto, la deuda externa de la nación sudamericana reportó en el mes de julio unos números récords al posicionarse por primera vez en mucho tiempo por encima del 50% del PIB nacional colombiano. Así mismo, las tasas de desempleo y devaluación del peso colombiano frente al dólar estadounidense siguen marcando números preocupantes. Al tener este escenario, no resulta complicado suponer que la venta de este activo, en contra sentido a los sentimientos que va demostrando el mercado con el oro, se haya hecho buscando una liquidez necesaria para sostener la economía en medio del difícil contexto que el coronavirus ha estado causando dentro de la nación sudamericana.