Abrir la mente y liberarte de las limitaciones que has grabado a fuego en tu cerebro es el principio del cambio. Date la oportunidad de preguntarte cosas nuevas y de obtener respuestas diferentes.
¿Te acuerdas de la primera vez que fuiste a un banco?. Yo creo que tampoco.
Sí que recuerdo perfectamente cómo fueron mis primeras cripto experiencias, que me pillaron bastante más consciente y después de haber trabajado muchos años en un banco.
Comparar desde ahí esas finanzas de toda nuestra vida, con las centralizadas o las descentralizadas en Blockchain y Web 3, me ha permitido comprender cosas de las primeras de las que sencillamente aún no había tomado conciencia. Sí, consciencia primero y conciencia después.
¿Sabes cuando aprendías algunos conceptos teóricos en la universidad y en tu vida profesional tienes ese momento eureka en el que te dices a ti misma ”ah, aquello era esto”, y los haces tangibles? (papel comercial: ¿qué será eso?, hasta que lo descuentas en la vida real). Pues diría que es un proceso muy similar al que me ocurrió con todo esto.
Conocer algo, saber de algo, y tomar consciencia y conciencia de algo, son grados de comprensión muy diferentes.
Primera parada para que no te líes
Un CEX o Exchange Centralizado, como Binance o Coinbase, en lo que nos centraremos hoy, no te hará dueño de tus criptomonedas. Ellos son los custodios.
La movida ésta de las palabritas, “ese gran poder que conlleva una gran responsabilidad”, es para cuando hablemos de Descentralización, ahí no necesitas pasar KYC (know your client), y sólo tú tienes el control de tus cripto en la blockchain, mediante por ejemplo con estas herramientas:
- En tu web 3 wallet (tipo Metamask)
- Con una cold wallet, como Ledger (lo que sujeta Leo en el meme), o Trezor entre otros.
Así que asumiendo superada la lectura del Whitepaper, (que junto con un research en Coinmarketcap o en Coingecko, es de 1º de DYOR: Do Your Own Research), he pensado en ir abordando algunos básicos, de momento, sobre la operativa centralizada de ambos mundos.
Mi primer KYC en un CEX ya me dejó boquiabierta, aunque debo reconocer que al principio ignoraba tanto lo que hacía, que incluso recuerdo pensar durante un tiempo: “y lo de todas esas palabritas ¿para cuándo?”. Aún no era capaz de percibir la diferencia entre un CEX y un DEX. Se podría decir que tuve buenos guías hasta que vi la luz. Pero recuerdo perfectamente cómo en esos primeros días, sólo pasar de la versión ligera a la pro de Binance ya me parecía todo un shock y que La frase que más pasaba por mi cabeza entonces, una y otra vez, era: “en qué mazmorra has estado metida mientras todo esto ocurría”.
Aunque en verdad, tampoco es que llevase tanto tiempo sucediendo
Y yo, que no quiero considerarme una inconsciente pre-pandémica, estaba aprendiéndolo todo sobre bienes raíces, egos (especialmente de cómo mantener a raya el propio, que es la pieza angular para identificar bien los ajenos), sobre el talento, la diversidad, la inclusión y reflexionando sobre la perversión de determinados incentivos de los modelos vigentes. Por pura curiosidad. Y justo llega cripto a mi vida, lo que entre otras muchas cuestiones me lleva a pensar que las DAO, supondrán todo un desafío para el mindset de muchas empresas.
También debo decir que las limitaciones burocráticas y de acceso a la financiación bancaria en el mundo de las inversiones inmobiliarias, han mantenido inaccesible este sector para un variopinto perfil de inversores (no hablo de usuarios), básicamente:
- de tickets bajos
- no dispuestos a lidiar con su gestión
- distanciados del nicho de oportunidad
Además, se trata de un sector con cantidad de pains burocráticos, inspiradores por molestos, que en definitiva es lo que te empuja a tratar de abordarlos desde otro punto de vista y qué casualidad que es precisamente así como surge la innovación.
En mi caso, la posibilidad de tokenizar inmuebles, vamos a decir que fue algo así como mi primera llamada. Antes de blockchain, antes de Bitcoin y de todo lo que vino después, que fue comprender el cambio de paradigma subyacente.
Un cambio en la concepción del dinero, cambia de forma radical la mayoría de los fundamentos económicos
Pero retomando esa primera experiencia, lo primero que tuve que entender fue:
- Qué Par tienen las criptos o tokens que quieres comprar, es decir, qué divisa o cripto necesitarás para poder hacerlo.
- En qué Exchange está listado el token que quieres. Elige uno.
- Y en qué Red opera: Ethereum, Bitcoin, Polygon, etc. Las redes, capas, cadenas laterales, etc. son algo así como múltiples autopistas, con sus peajes -más conocido como gas-, básico para enviarlas o recibirlas. Sólo ten en cuenta que la red de origen y destino deben coincidir, o estarás enviando tus criptos a una carretera sin salida
Hasta aquí lo básico, pero en cuanto dispongas de tus fondos (tarjeta o IBAN), vendrá:
- Tu primer trade (tramitar una orden de compra)
- O un simple swap (intercambiar una criptodivisa por otra).
Quizás ya te hayas fijado que hay términos financieros que no significan exactamente lo mismo en ambos mundos. ¿Cuál aprenderás antes?
Un paso adicional para rentabilizarlos (para principiantes y/o conservadores), sería:
- Staking/Earn. Flexible o Bloqueado al plazo que decidas (suelen ser quincenas, meses y a lo sumo trimestres). Con liquidación de intereses y posibilidad de inversión diaria.
Un momento revelador, en medio de todo este sarao, es cuando descubres que existen un tipo de activos que se llaman Stablecoins, que principalmente replican el valor del $, ergo nada volátiles, y por las que se puedes obtener fácilmente rentabilidades de entre un 5% y un 10% anual. Bienvenidos a los “plazos fijos” de las nuevas finanzas.
Aprender sobre cripto será más divertido que lo que hayas conocido de las finanzas hasta ahora
Sí, las finanzas pueden ser divertidas. Deben serlo para que sean un conocimiento popular. Los memes lo son. Concentrar el conocimiento en unos pocos no le sirve de nada a la mayoría. Salvo que seas una ameba, tendrás relaciones económicas así que las finanzas también van contigo.
Si no flipas sólo es porque aún no lo has entendido, porque flipar sería lo normal. Te recomiendo seguir encajando poco a poco todas las piezas. Descubrir que ya hay un sistema financiero directo, montado como un lego, con un potencial brutal y que no para de expandir sus posibilidades es una experiencia que no tiene precio, y eso que aún vemos muy poco del cambio que se nos viene encima.
“Conecta tu wallet” y bienvenido a una nueva dimensión financiera. Pero eso será cuando lo comparemos con las Finanzas Descentralizadas, que me temo que, conscientemente, creo aún es para pros y devotos, tan nerds como una servidora.
Bonus track por si quieres más: Un par de personajes que me contagiaron su entusiasmo por Blockchain, fueron Wences Casares y Roger Ver en Cryptopia. Tanto la experiencia Argentina del primero, como el encuentro con el Whitepaper de Satoshi del segundo… ¡Te pondrán la piel de gallina!
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