Una vez más están matando a Bitcoin: ¿Qué hizo que el precio bajara y qué cambió realmente en los últimos 6 meses?
- El valor no es lo mismo que el precio
- Problemas eternos afectaron la confianza
- Los momentos de crisis pueden presentar grandes oportunidades
Si escuchas las noticias, probablemente sabrás que Bitcoin está muerto. Todos los valores de las criptomonedas desaparecieron. Todo porque cayó el precio de Bitcoin. Pero si eres experto en inversiones, sabes que esta historia es muy antigua. En todos los mercados bajistas, los medios principales decretan el fin de Bitcoin. Esto ocurrió en 2014, 2017, 2020 y está ocurriendo otra vez.
No obstante, vivir estos momentos puede ser la gran oportunidad de tu vida. Dedica 5 minutos de tu tiempo a leer este texto y comprender por qué. Bitget, un exchange de criptomonedas a nivel mundial, ha separado algunos temas importantes para que puedas comprenderlo.
¿Qué ocurrió con el precio de Bitcoin?
El 10 de noviembre de 2021, BTC alcanzó su valor más alto de todos los tiempos frente al dólar (cerca de $69.000). Desde entonces, ha caído drásticamente en más del 60%, y operó a $18.000 el 18 de junio de 2022.
Antes que nada, hacemos énfasis en la diferencia entre el valor y el precio. El valor es algo intrínseco al producto, a sus cualidades, mientras que el precio es el ratio que le atribuyen otras personas en comparación con una moneda fiat (el dólar, en este caso).
Pero, ¿qué ocurrió en esos 7 meses que haya afectado el precio de Bitcoin?
1. Inflación e intereses
Después de 2 años de pandemia, la economía global enfrenta desafíos trascendentales en el control de la inflación. Para ayudar a la sociedad, los gobiernos imprimieron dinero (¡mucho dinero!), devaluando las monedas que ya estaban en circulación. Sumado a los cierres de fábricas y a la reducción de empleos, apareció la inflación. Ahora, los gobiernos aumentan las tasas de interés en la economía en un intento por reducir los impactos de la inflación, provocando que las personas reduzcan su exposición a inversiones alternativas y destinen su capital a ingresos fijos.
2. Confianza en la industria
En la primera mitad de 2022, la industria de las criptomonedas experimentó algunos desafíos técnicos que pueden haber sacudido la confianza de los inversores en el sector. El principal fue la caída del LUNA (UST), una moneda que debería ser estable frente al dólar, pero perdió paridad y liquidez, disolviendo las reservas de muchas personas.
3. Presión regulatoria
Con la fuerte popularización de las criptomonedas en la primera mitad de 2021, los gobiernos comenzaron a prestar atención al Bitcoin y trataron de dificultar el acceso a la inversión. En algunos países, se prohibió (otra vez) la compra y la posesión de criptomonedas, mientras que otros siguen exigiendo la declaración de las inversiones en “activos digitales”. De esta manera, grandes instituciones (bancos y empresas de inversión) comenzaron a enfrentar nuevas barreras y dificultades legales para comprar y hacer trading.
Pero, ¿Qué sucede con Bitcoin en ese caso?
El whitepaper de bitcoin (BTC) se presentó en octubre de 2008, y allí se describieron todas sus características, incluso cuántas monedas habría y cuáles serían sus valores básicos. Desde entonces, estas monedas han sido minadas, y ninguno de sus valores cambió ni se fracturó.
Una de las características principales es la no existencia de un banco central que pueda crear nuevas monedas para “salvar” a la economía, como lo hicieron los gobiernos durante la pandemia, provocando la inflación que experimentamos ahora. La cantidad de monedas que existirá está predeterminada, lo que hace que el BTC sea deflacionista y, en consecuencia, gane valor con el transcurso del tiempo.
Mientras que otras monedas como UST tienen un “propietario”, Bitcoin está completamente descentralizado. En consecuencia, ninguna persona ni empresa puede desconectarlo, cambiarlo ni simplemente desaparecer con el dinero de los inversores. Una vez adquiridos, los BTC pasan a ser de tu propiedad, al igual que su valor intrínseco.
Al ser descentralizado, resulta difícil la reglamentación por parte de las entidades gubernamentales. El inversor es el único propietario de su información de inversión y es el único responsable de declarar los activos que tiene en su posesión.
Bitcoin no murió
Incluso después de la caída drástica del precio frente al dólar, los valores reales de Bitcoin permanecen sin cambios. En los descensos de 2014, 2017 y 2020, los inversores que realmente vieron estos valores intrínsecos fueron aquellos que pudieron comprar BTC a un precio más bajo. El inversor que crea en estos valores podrá mirar en retrospectiva dentro de 1, 2 o incluso 5 años, y analizar si tomó una buena o una mala decisión, mientras los medios predican el fin de Bitcoin.
Hoy, comprar Bitcoin o cualquier otra criptomoneda es muy fácil. Puedes usar transferencia bancaria, tarjeta de crédito o incluso métodos por cheque, según el país en donde vivas. En plataformas como Bitget, puedes comprar directamente a un comerciante de tu país (P2P) o utilizar un proveedor de servicios.
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A medida que aprendas sobre las criptomonedas, podrás hacer trading de criptomonedas. Así, podrás hacer trading para lograr que tu inversión sea incluso más rentable, y utilizar las ganancias para comprar criptomonedas nuevas para el largo plazo. Pero no te apresures. Toma las mejores decisiones para tus inversiones, analizando siempre el valor real de cada activo invertido.
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