Bitcoin ha mantenido su impulso alcista de precios a pesar de los recientes acontecimientos en Rusia que han amenazado la estabilidad del país. El activo digital insignia continuó cotizando cerca de 31,000 dólares a pesar de las incertidumbres.
Según los datos de BeInCrypto, Bitcoin aumentó ligeramente un 0.34% en las últimas 24 horas y ahora cotiza a 30,727 dólares, acercándose poco a poco a su pico anual de más de 31,000 dólares.
Durante la semana pasada, el activo digital insignia experimentó una nueva ola de interés institucional, con varias instituciones financieras tradicionales solicitando un ETF spot de Bitcoin. Esto resultó en un mercado más alcista ya que los traders parecían despreocupados por los eventos en Rusia.
El mercado cripto no se inmuta
Otras criptomonedas tampoco se vieron afectadas por los eventos que ocurrieron en Rusia, con un aumento de la capitalización total en un 0.44% a 1.19 billones de dólares, según datos de CoinMarketCap.
Ethereum aumentó 1.48% a 1,916 dólares durante el período del informe, mientras que otros tokens como XRP, Cardano, TRON, Polkadot también registraron ganancias mínimas.
Mientras tanto, esta es una gran diferencia con respecto a cómo reaccionó el mercado cuando Rusia invadió Ucrania en 2022.
En ese momento, el valor del mercado cripto cayó significativamente debido a que la incertidumbre en los países afectó las convicciones de los traders.
¿Golpe de Estado en Rusia?
Según la BBC, Rusia experimentó 24 horas volátiles después de que el jefe de Wagner, Yevgeny Prigozhin, protagonizara una insurrección y casi llegara a Moscú con sus tropas en lo que llamó una “Marcha por la Justicia”. Wagner es un grupo mercenario que Rusia está utilizando para librar su guerra en Ucrania.
Prigozhin, un antiguo aliado del presidente Vladimir Putin, acusó a los jefes militares rusos de orquestar ataques mortales contra sus hombres.
Antes de eso, había criticado sistemáticamente a los jefes militares por no proporcionar a sus mercenarios suficientes equipos y municiones.
Si bien Prigozhin afirmó que la marcha llevada a cabo en Rusia no fue un golpe de Estado, la insurrección tenía todas las características de una, y el presidente Putin la describió como una “puñalada por la espalda” que tendría graves consecuencias.
Mientras tanto, después de conversaciones con el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, el Jefe Wagner canceló la marcha de unas 100 millas hasta Moscú.
Los informes de los medios de comunicación de Rusia sugieren que el Kremlin ha retirado los cargos penales contra Prigozhin y que se iría a Bielorrusia.
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