El Banco de España ha advertido acerca de una espiral inflacionaria que podría frenar el crecimiento económico del país en este y los próximos años. Entre las consecuencias destacan una disminución en el empleo y el PIB per cápita, así como un incremento sectorial y generalizado en el volumen de precios.
El Banco de España ha declarado que podría avecinarse una espiral inflacionaria en los próximos años, la cuál puede reducir no solo PIB sino también la calidad de vida de la ciudadanía española. La hasta ahora hipotética espiral inflacionaria seguiría hasta 2024, ocasionando recesión e incluso estragos en algunos sectores productivos, lo que se traduciría en una disminución de la renta disponible real de los hogares españoles.
Informó Pablo Hernández de Cos para el medio de comunicación El Mundo.
“Las simulaciones efectuadas mediante el Modelo Trimestral del Banco de España (MTBE) subrayan los beneficios de una política de rentas exitosa. El impacto negativo acumulado sobre la actividad y el empleo, en diferencias respecto a las proyecciones actuales, si se produjese esta traslación completa, podría ser de aproximadamente 1,5 puntos porcentuales en 2024.”
A diferencia del año pasado en el que España logró un crecimiento económico mayor al 5%. La entidad monetaria afirma que el PIB español no tendrá un crecimiento sobresaliente en estos años. Las predicciones más optimistas marcarían un rango de entre el 2% y el 2,5%. Si la espiral inflacionaria llega a surgir en España, Hernández afirma que el crecimiento llegará a ser a lo sumo de un 1%.
Trampa inflacionaria en el mercado de trabajo
La solución para prevenir una inflación generalizada, según el Banco de España, es un acuerdo mutuo en cuanto a la negociación de salarios en el mercado de trabajo. Según lo descrito por el MTBE, podrían existir ciertos detonantes para que pueda surgir una especie de “trampa inflacionaria” en dicho mercado. Pero, en todo caso ¿A qué espiral inflacionaria se refiere el Banco de España.
Ya sea que en el futuro llegue a ser real o se mantenga como hipotética; la trampa inflacionaria funcionaría de la siguiente manera:
- Surge un incremento sectorial o incluso generalizado en el nivel de precios por factores externos. (Como es el caso del Conflicto de Rusia y Ucrania, o el nuevo confinamiento en China).
- Disminución en los salarios reales de los consumidores, o en otras palabras, empobrecimiento de los mismos.
- Exigencia por parte de los sindicatos por incrementar los salarios.
- Incremento de salarios.
- Nuevo incremento de los precios por parte de las empresas para recuperar lo “perdido” con el incremento de salarios.
- Repetición del ciclo.
La solución que proporciona el Banco es un llamado “pacto de rentas” en el que ambos, tanto personas trabajadoras como empresas asuman parte de los costos de la inflación. Esto para evitar un repunte todavía mayor en el volumen de precios que pudiera llegar a ocasionar inestabilidad en diversos sectores productivos.
Todavía no están claros los detalles acerca de cómo busca el Banco de España que se implemente dicha estrategia. Hasta la fecha recalca, no obstante, el esfuerzo de la mitad de las empresas en asumir el costo de la inflación en sus márgenes de ganancias. Lo que significa que aún no todas las empresas han trasladado el incremento de sus costes operacionales a los precios de sus productos, lo que da cierto margen de maniobra para un acuerdo en el mercado de trabajo.
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