Solana (SOL) ha enfrentado desafíos significativos en su precio en las últimas semanas, con una caída notable que lo ha dejado luchando por recuperarse.
Este declive ha generado preocupaciones en el mercado, agravadas por una señal bajista clave. Hay una creciente preocupación entre los inversores de que estos factores podrían llevar a un mayor pesimismo en el corto plazo.
Solana enfrenta un fuerte pesimismo
El precio de Solana ha caído por debajo del precio realizado por primera vez en casi 3 años. El precio realizado es una métrica clave que representa el precio promedio al que un activo se movió por última vez.
Cuando el precio spot cae por debajo de este, indica que los holders de Solana están experimentando colectivamente pérdidas no realizadas netas.
Esta situación a menudo se considera una señal bajista, ya que sugiere que los inversores están sentados sobre pérdidas, lo que puede llevar a algunos a vender en un intento de evitar más caídas. Como resultado, el potencial de ventas de pánico aumenta cuando el precio se negocia por debajo del precio realizado.

A una escala más amplia, Solana también está experimentando un débil momentum macro, destacado por los indicadores técnicos.
El Chaikin Money Flow (CMF), que mide el flujo de dinero ponderado por volumen dentro y fuera de un activo, ha notado una fuerte caída. El CMF está actualmente por debajo de la línea cero, indicando que las salidas están dominando las entradas.
Mientras el CMF permanezca negativo, sugiere que la recuperación del precio de Solana podría verse obstaculizada. La falta de interés de compra y el dominio de la actividad vendedora probablemente limitarán cualquier movimiento alcista significativo.

El precio de SOL es vulnerable a una caída
El precio de Solana ha caído casi un 30% en los últimos diez días, y actualmente se negocia a 125 dólares, justo por debajo del nivel de resistencia crítico de 126 dólares.
A pesar de haber rebotado recientemente en el soporte de 118 dólares, el sentimiento general y las condiciones del mercado sugieren que la recuperación podría ser de corta duración. El precio sigue bajo presión, con posibles caídas adicionales si los niveles clave no se mantienen.
Si Solana no logra asegurar los 126 dólares como soporte, la altcoin podría caer de nuevo a 118 dólares o incluso más bajo, posiblemente alcanzando los 109 dólares.
Este escenario reforzaría la perspectiva bajista y prolongaría la lucha por la recuperación. Sin un fuerte rally, Solana podría enfrentar más pérdidas en el corto plazo.

Sin embargo, si Solana logra superar y convertir los 126 dólares en soporte, podría desencadenar un rebote hacia los 133 dólares, seguido de una posible resistencia en los 143 dólares.
Una ruptura exitosa de los 143 dólares invalidaría la tesis bajista actual y señalaría una recuperación más fuerte. Si esto ocurre, Solana podría recuperar algunas de las pérdidas que ha sufrido recientemente, ofreciendo esperanza a los inversores.
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