El cofundador de Ethereum, Vitalik Buterin, ha presentado “The Purge”, la quinta entrega de una serie de actualizaciones propuestas diseñadas para optimizar el almacenamiento de datos y la complejidad del protocolo de la red Ethereum.
Esta actualización es crucial ya que la escalabilidad, seguridad y sostenibilidad a largo plazo de Ethereum dependen de una arquitectura de datos estable y manejable.
Abordando el almacenamiento de datos en Ethereum
La actualización “The Purge” de Buterin introduce un marco que apunta a las crecientes demandas de almacenamiento de Ethereum. Al eliminar el historial de red obsoleto, busca aliviar los cuellos de botella y reducir el espacio en disco duro necesario para ejecutar un nodo.
Actualmente, ejecutar un nodo de Ethereum requiere alrededor de 1.1 terabytes de espacio en disco solo para el cliente de ejecución, junto con varios cientos de gigabytes más para el cliente de consenso.
De hecho, los requisitos de almacenamiento crecen cientos de gigabytes cada año, incluso sin aumentar el límite de gas de Ethereum.
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The Purge sugiere un enfoque descentralizado para el almacenamiento de datos a través de los nodos de la red. En lugar de que cada nodo contenga el historial completo de la red, podrían almacenar segmentos más pequeños y aleatorios.
Esto permitiría mantener la redundancia de datos sin que cada nodo necesite almacenar la misma información.
“Si, al hacer que la ejecución de nodos sea más asequible, podemos llegar a una red con 100,000 nodos, donde cada nodo almacena un 10% aleatorio del historial, entonces cada pieza de datos se replicaría 10,000 veces – exactamente el mismo factor de replicación que una red de 10,000 nodos donde cada nodo almacena todo,” explicó Buterin.
Otra propuesta clave es introducir un enfoque “sin estado” para gestionar los datos de estado de Ethereum. Esto podría ayudar a mantener el total de datos por debajo de 8 terabytes durante décadas.
Para optimizar aún más el almacenamiento, Buterin también sugiere explorar la expiración parcial o total del estado, donde ciertos datos antiguos podrían desaparecer, combinado con ajustes en el espacio de direcciones.
Señaló que la expiración del estado podría simplificar las transiciones entre formatos de datos, ya que los nuevos árboles de estado podrían introducirse sin conversiones complejas.
Simplificando el protocolo
Más allá del almacenamiento, Buterin destaca la necesidad de mantener el protocolo de Ethereum eficiente y amigable para el usuario. Simplificar el protocolo podría reducir errores y hacer que la red sea más fácil de navegar para desarrolladores y usuarios.
Una opción es la “ossification“, un proceso que congela el protocolo, deteniendo nuevos cambios para mejorar la estabilidad.
Por otra parte, Ethereum podría eliminar selectivamente características obsoletas, manteniendo la compatibilidad hacia atrás mientras minimiza la complejidad innecesaria.
“Un camino intermedio, de hacer menos cambios al protocolo, y también de eliminar al menos un poco de complejidad con el tiempo, también es posible,” añadió Buterin.
Mientras tanto, Buterin reiteró la necesidad de simplicidad y compatibilidad con versiones anteriores. Según él, esto proporcionaría estabilidad a las aplicaciones que necesitan un soporte fiable y a largo plazo.
“El valor de Ethereum como cadena proviene de ser una plataforma donde puedes desplegar una aplicación y tener la confianza de que seguirá funcionando muchos años después,” concluyó.
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