La Fundación Bruce Lee confirmó su desembarco en la Web 3.0 para homenajear al ícono de las artes marciales. El proyecto es posible gracias a la asociación que establecieron con plataforma Shibuya. Ya es posible hacerse de un NFT por la suma de 15 dólares, y comprando la cantidad que desee el interesado.
La pieza lleva por nombre “House of Lee: Génesis” y ofrece obras del actor dibujadas a mano por Emily “pplpleasr” Yang. Las imágenes fueron diseñadas en colaboración con Shannon Lee, hija del fallecido ícono, fundadora y presidenta de la Fundación Bruce Lee.
Al ingresar a la interfaz para realizar la compra, el usuario puede advertir el mensaje “Esta es tu entrada para la Casa de Lee”. No obstante, lo que aparenta ser parte de un futuro plan no tiene aún información confirmada en ese sentido. También puede verse en el sitio un reloj en cuenta regresiva que marca la finalización de esta iniciativa con el primer segundo del próximo viernes.
A modo de celebración, Shibuya tuiteó:
“10,000 acuñados. No temo al hombre que ha acuñado 10,000 NFT una vez, pero temo al hombre que ha acuñado un solo NFT 10,000 veces.”
La historia de Bruce Lee
Rotular a Bruce Lee únicamente como un artista marcial es un estricto acto de injusticia. Su perfil se completa con definiciones como maestro de artes marciales, actor, cineasta, filósofo y escritor hongkonés. A pesar de haber nacido en San Francisco, California, se crio en Hong Kong desde los cuatro meses de edad.
Lee es ampliamente considerado por críticos, expertos, medios y grandes artistas marciales como el artista marcial más influyente de todos los tiempos, ícono de la cultura pop del siglo XX.
Sus orígenes en la industria del cine lo sitúan como actor infantil en Hong Kong. Participó en varios melodramas y comedias de aceptable seguimiento popular. Trasladado de nuevo a su tierra de origen, los Estados Unidos, Lee desempeñó diversos oficios, pero sin desatender su formación como luchador y sus estudios de filosofía en la Universidad de Washington. A lo largo de su vida mostraría particular interés por la tradición oriental.
Según apuntan todas sus biografías, parte de la comunidad china en Estados Unidos le recriminó que impartiese lecciones de kung-fu entre sus alumnos occidentales. Figura compleja, llena de ambiciones, Bruce Lee fue ampliando su negocio de enseñanza por toda California, y varias estrellas de Hollywood se interesaron por sus prácticas. Animado por su esposa, acudió a varias audiciones para convertirse en actor de cine.
Una intervención especial en Longstreet y su aportación decisiva para el desarrollo argumental de Kung-Fu completaron su carrera televisiva. Decepcionado por sus escasos logros en la industria audiovisual estadounidense, se decidió a emigrar de nuevo a Hong Kong, donde ya era muy conocido.
Su muerte
Bruce Lee murió a los 32 años y aquel fatídico día de 1973 tuvo una jornada extensa en la que, entre otras cosas, se reunió con los productores de su próxima película. También se dirigió a la casa de un amiga donde pasó varias horas.
Alrededor de las 19:30 hs Lee se quejó de dolor de cabeza. Ting Pei, su supuesta amante, le dio a Lee un Equagesic, un analgésico común que contiene aspirina y un tranquilizante conocido como meprobamato. Después de tomarlo, se fue a acostar y murió.
El cuerpo de Bruce Lee no tenía signos externos de lesión y se realizó una autopsia que reveló que la muerte fue el resultado de una grave inflamación cerebral.
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