Venezuela, considerado la verdadera cripto-nación previo a la irrupción de El Salvador, está pasando por un tiempo convulso, en la que los departamentos empleados para el desarrollo y regulación de las criptomonedas se encuentran envueltos en supuestos casos de corrupción, afectando directamente a la industria cripto local.
La SUNACRIP es la institución pública de Venezuela que tiene funciones exclusivas para organizar, planificar, regular, promover y coordinar la adopción y el uso del criptoactivo en Venezuela. La labor de este departamento siempre ha sido relevante para la industria cripto nacional como la internacional, debido a que su comportamiento podría servir de ejemplo, tanto en lo positivo como lo negativo, para futuros departamentos similares en otros países.
La SUNACRIP ha sido responsable de otorgar licencias cripto para operar en Venezuela, instaurar regulaciones nuevas para el sector cripto así como de actuar como policía aplicando las leyes mediante cierres de la minería de las criptomonedas. Anteriormente, ha habido quejas de cómo este departamento requisaba un gran volumen de equipos de minería mediante redadas, para después utilizarlo para su propio beneficio, sin embargo estas alegaciones no han llegado a probarse o demostrarse ante la justicia venezolana.
Actualmente, la SUNACRIP se encuentra bajo fuego debido a acusaciones de corrupción al superintendente del departamento, Joselit Ramírez. El caso abierto ha culminado con el cese inmediato de Ramírez y posteriormente su arresto por actos de corrupción asociados a la desaparición de 3,000 millones de dólares americanos en criptomonedas, derivado por la venta de petróleo.
Las autoridades venezolanas han reaccionado velozmente y cuentan incluso con la presencia de Nicolás Maduro, señal de la relevancia del caso. En este sentido, el presidente venezolano designó una junta reestructuradora presidida por Anabel Pereira Fernández y tres directores principales: Héctor Andrés Obregón Pérez, Luis Alberto Pérez González y Julio César Mora Sánchez. Por ahora se conocen pocos detalles debido que la investigación no se está realizando con transparencia, si se conoce que la reestructuración estará vigante durante 6 meses.
Efectos de la reestructuración de la SUNACRIP: granjas mineras y exchanges de criptomonedas cerrados
BeInCrypto pudo conocer que se habían ordenado cerrar varias granjas mineras de criptomonedas gracias a una fuente con un puesto relevante en Venezuela que prefiere permanecer en el anonimato.
La orden para el cierre de las granjas viene dado por la empresa pública encargada de gestionar el consumo eléctrico en Venezuela, Corpoelec, de la mano de Indira Romero, del departamento de Gerencia Comercial, Atención a Grandes Usuarios y Minería Digital, quien hace de enlace entre los mineros y la empresa estatal.
El cierre de las granjas mineras de criptomonedas en Venezuela es una medida temporal tras la detención de Ramírez. Las operaciones de minería reguladas fueron detenidas a lo largo de todo el país, desde los estados Lara, Carabobo, Miranda y Distrito Capital, entre otros.
La misma fuente que informó a BeInCrypto también citó como “todos los exchanges fueron cerrados desde el lunes por la tarde en Venezuela”. Por ende, las operaciones de los exchanges de criptomonedas venezolanos estaban siendo también afectados por el caso de la SUNACRIP. Recientemente, se ha podido obtener confirmar esta alegación ya que el afamado exchange de criptomonedas venezolano, Cryptobuyer, ha informado sobre cese de sus operaciones de manera temporal tras órdenes directas de la SUNACRIP.
Aún se desconoce las razones para que se deba cerrar la actividad del tejido industrial de las criptomonedas en Venezuela por el caso de la SUNACRIP, por ahora las víctimas colaterales están siendo los venezolanos, concretamente los usuarios de criptomonedas.
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