Los argentinos utilizan cada vez más tarjetas y monederos digitales como un efecto provocado por la inflación. Los datos fueron publicados por la firma Prisma Medios de Pagos y corresponden al primer trimestre de 2023. El estudio no hace más que confirmar con datos la dificultad que atraviesan quienes deben utilizar dinero en efectivo.
A raíz de la devaluación de la moneda local, pagar servicios cotidianos, como el combustible o los productos del supermercado, puede implicar hacerse de una gran cantidad de billetes. El informe concluye que la gente evita ese proceder y ha convertido a la digitalización en una tendencia consolidada.
Julián Ballarino, Head de Relaciones Institucionales de Prisma, detalló parte de los movimientos detectados por el trabajo:
“Las tarjetas continúan ganando terreno al efectivo. Se da un crecimiento interanual de las operaciones con tarjeta de crédito del 22,44% y del 6,27% con tarjeta de débito. Las tarjetas de débito se emplean hoy más como medio de pago en distintos comercios que como una herramienta para extraer dinero de los bancos”.
El informe ha confirmado que las extracciones por cajero bajaron casi un 10% desde el primer trimestre del año pasado. Incluso son menores de lo registrado en el último trimestre de 2022. Al mismo tiempo, aumentó la cantidad de operaciones de retiro de dinero en los comercios, una actividad que se vuelve cada vez más común y más “cómoda” que el paso por las terminales de cajeros en los bancos.
A todo esto, otro apunte del trabajo señala un crecimiento superior al 6% del uso de tarjetas de débito para pagar compras. El economista de Epyca Consultora, Martín Kalos, explicó el cambio al diario Clarín.
“La digitalización de los medios de pago es una tendencia creciente durante la pandemia, lo que se refleja en la disminución relativa del uso de cajeros automáticos para obtener efectivo, y en un aumento en la proporción de transacciones realizadas en locales.”
Los rubros que más crecieron interanualmente en transacciones con tarjetas son Farmacias con un 20%, Restaurantes con un 19% y autopartes y motocicletas con un 18%.
El informe muestra el uso de tarjetas para financiar consumos en Argentina
Vivir con aumentos en el orden del 7% mensual lleva a muchos argentinos a comprar con tarjeta de crédito y “ganarle” a la inflación. Un movimiento usual en estos tiempos es utilizar esa estrategia en los supermercados, conducta que llevó a muchas superficies a racionar productos para evitar compras masivas.
Las compras con plásticos hechas en un pago representaron poco más del 57% del total de las operaciones. Ese dato implica una leve caída de lo que se veía un año atrás. Por otra parte, el informe destacó que las compras con planes de cuotas “bancarios” crecieron más de 4%. En contrapartida, las de los planes Ahora (implementados por el Gobierno) se contrajeron cerca de un 5%.
El incremento de las cuotas de los planes oficiales y la incertidumbre de endeudarse a plazos largos hace que también los consumidores elijan financiarse por entre tres y seis meses. Según detalló Prisma, los planes “cortos” aglutinaron más del 67 % de las compras que fueron financiadas, mientras que planes más extensos (Ahora 12 y Ahora 24) fueron quedando relegados.
Estos datos de Prisma coinciden con los presentados recientemente por la FinTech Naranja X. La empresa reportó que durante 2022 el 82% de sus clientes optó por financiar sus consumos. “De ese total, el 49% se decidió por el plan de 3 pagos sin interés (Plan Z), alrededor del 20% eligió cancelar en 6 cuotas, y otro 15% financió sus consumos en 12 cuotas”, explicaron.
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