Bitcoin (BTC) sorprendió a los mercados al romper su tradicional correlación con el Nasdaq 100, justo en una semana en la que tanto el oro como las acciones tecnológicas registraron ganancias. Este cambio ha despertado debate entre analistas sobre el papel real de Bitcoin: ¿Activo de riesgo o refugio seguro?
En este análisis exploramos qué factores impulsaron el desacople entre Bitcoin y Nasdaq, cómo influyó el apalancamiento y qué señales muestran las altcoins ante un entorno macro incierto.
SponsoredEl “divorcio” de Bitcoin y el Nasdaq: causas y significado
El desacople entre Bitcoin y el Nasdaq comenzó tras el 15 de octubre, cuando el índice tecnológico cerró la semana con un modesto avance del 0.44 %, mientras que BTC cayó 3.71 %. Hasta entonces, ambos activos habían mantenido una fuerte correlación, subiendo y cayendo al unísono.
El punto de quiebre se produjo después del discurso del presidente de la Fed, Jerome Powell, quien sugirió una posible reducción de tasas. Mientras el Nasdaq reaccionó positivamente, Bitcoin mostró una caída abrupta alimentada por un evento previo: el crash del mercado cripto del 10 de octubre, que liquidó más de 19 mil millones de dólares.
Este desplome eliminó la presión compradora especulativa y evidenció que el último repunte de BTC había sido impulsado por apalancamiento y demanda sintética, no por compras spot genuinas.
Los datos de CryptoQuant muestran que las entradas de USDC a exchanges spot disminuyeron, mientras las de USDT a derivados crecieron. Es decir, los traders apostaban más al corto plazo que a la acumulación real de Bitcoin.
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El papel del apalancamiento y la resiliencia de las altcoins
El apalancamiento excesivo se convirtió en un catalizador clave. Al colapsar los contratos perpetuos, el mercado eliminó posiciones forzadas y redujo la liquidez activa. Este ajuste explica por qué Bitcoin no logró acompañar el rebote del Nasdaq pese al entorno optimista.
Aun así, la confianza general en el ecosistema cripto no se ha desvanecido. Ethereum (ETH) subió 5.96 % y Solana (SOL) avanzó 7.12% durante el mismo periodo, mostrando fortaleza entre las altcoins. Esta divergencia sugiere una rotación de capital hacia activos de menor capitalización, mientras Bitcoin consolida entre110,000-111,000 dólares.
En paralelo, la expectativa geopolítica aporta algo de alivio. Comentarios recientes de Donald Trump y las negociaciones entre Estados Unidos y China han mejorado el sentimiento global. Si el diálogo comercial progresa, podría beneficiar a los mercados de riesgo, incluido el sector cripto.
¿Qué esperar? Factores macro y próximos movimientos
El foco ahora está en los indicadores macroeconómicos de EE. UU., incluidos el IPC, los PMI y las expectativas de inflación de la Universidad de Michigan. Una lectura favorable podría apoyar la estabilidad del Nasdaq y permitir que Bitcoin retome su correlación tradicional.
Por el contrario, cifras negativas prolongarían la independencia de BTC y confirmarían su nuevo rol como activo híbrido: sensible al riesgo, pero con dinámica propia.
En resumen
Bitcoin se desacopló del Nasdaq tras un colapso de apalancamiento y baja demanda spot. Mientras las altcoins ganan tracción, el mercado espera señales macro para definir si el activo digital volverá a moverse en sincronía con los índices tradicionales.
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