Este miércoles, el Credit Suisse, uno de los bancos más grandes de Europa, sufrió una crisis en bolsa que puso al sistema bancario europeo en jaque. El miedo de que la crisis bancaria de EE. UU. llegase hasta Europa es real y así lo ha asegurado este jueves el Banco Central Europeo al advertir que varios bancos de la zona siguen siendo vulnerables.
Previo a la subida de tasas de interés que realizó el Banco Central Europeo, ECB por sus siglas en inglés, el vicepresidente de la institución bancaria, Luis de Guindos, les aseguró a los ministros de la Unión Europea que muchos bancos son susceptibles a verse afectados por los movimientos de la economía y por la subida de tasas.
Los comentarios de Guindos se dieron en la Ecofin, una reunión que se da en Bruselas en la que participan los ministros de economía de la zona euro. En ella, el vicepresidente aseguró que, aun cuando los bancos europeos tienen menos exposición a una crisis bancaria que los de EE. UU., hay muchos que sí se podrían ver afectados.
Lo que es una realidad para Guindos es que el banco central tiene una lucha compleja contra la inflación, lo que lo obligará a subir tasas de interés hasta controlarla. Esto es lo que podría derivar en más problemas para los bancos de la zona, volviéndolos así más susceptibles a una crisis.
Las declaraciones llegan en una semana complicada como se mencionó anteriormente. El Credit Suisse sigue estando en un punto de incertidumbre a pesar de que las acciones repuntaron en la mañana de este jueves, y en EE. UU. y Europa se sigue con atención la situación bancaria tras la crisis comenzada el viernes pasado con el cierre del Silicon Valley Bank.
El Banco Central Europeo aumenta las tasas
En medio de esta crisis, el Banco Central Europeo ha aumentado este jueves 16 de marzo sus tasas de interés en 50 puntos porcentuales, en lo que es la continuación de su plan anti-inflación que vienen ejecutando desde mediados del 2022.
Pero tras dar el anuncio, Christine Lagarde, presidente del banco, no dio detalles de cómo serán sus próximos pasos. Aun así, Lagarde sí confirmó que hay mucho por recorrer en lo que se refiere a los objetivos del banco.
“Si la línea de base tal como la tenemos se confirmará y persistiera, tendríamos más terreno que cubrir”.
Ahora bien, estos comentarios son sumamente importantes en las circunstancias actuales. Y es que, en EE. UU. se está apostando a que la Reserva Federal, Fed por sus siglas en inglés, detenga su política agresiva de subida de tasas por todo lo que está pasando en su sector bancario.
Si la Fed, que ha sido quien ha llevado la batuta en los últimos meses en lo que a política económica se refiere, detiene su subida de tasas, sería un indicador de lo que podrían terminar haciendo sus contrapartes europeas.
Ahora solo habría que esperar. Lagarde ha asegurado que están atentos y recopilando información para actuar en los días. También explicó que la mayoría a de los directivos del Banco Central Europeo apoyaron la subida de tasas porque la inflación “ha estado muy alta y por mucho tiempo”.
Todo apunta a que la última palabra la tendrá Jerome Powell la semana que viene cuando anuncie las políticas que tomará la Fed. Mientras eso pasa, los mercados siguen expectantes ante lo que pudiese suceder en el mundo bancario.
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