El invierno cripto está por cumplir un año mientras el mundo sigue bajo el asecho de una recesión. Esto ha generado un panorama de incertidumbre para el sector de las criptomonedas que se ha encontrado con que el interés que hubo hace unos años ha llegado a mínimos históricos y las posibilidades de que varias empresas no sobrevivan son altas.
Por esto muchas cosas han empezado ha cambiar. Firmas que hacen rebranding, compañía que se restructuran y una parte del sector DeFi que ha decidido enfocarse en los productos financieros tradicionales, antes que en las criptos y activos digitales riesgosos.
Así lo demuestra un reciente reportaje de Bloomberg en donde se explica que muchas empresas que hace no mucho se enfocaban únicamente en el mundo cripto, han decidido voltearse y empezar a ofrecer activos que van desde bonos del tesoro de Estados Unidos en adelante.
Este cambio se debe a que el mercado tradicional se ha vuelto mucho más atractivo para los inversores que el cripto producto del colapso de las criptomonedas y el inicio de una política monetaria agresiva por parte de la Reserva Federal que ha elevado a las tasas a niveles que hacen que los activos riesgosos sean menos deseados.
A estas circunstancias se agrega la caída de Terra, un proyecto que espantó a los inversores de los tokens DeFi, un sector cripto que había tenido un alza durante 2021, pero que se encuentra con un volumen estancado y en mínimos bajos tras las caídas del 2022.
Por todo esto, las empresas han cambiado su enfoque. Así se encuentran casos como MakerDAO que a finales del 2022 compró 500 millones de dólares en bonos corporativos y del tesoro.
Mercado DeFi crece silenciosamente
O el caso de Ondo Finance, empresa DeFi que en este mes de enero lanzó al mercado un fondo en el que los holders de su token podrán invertir en bonos del tesoro y sacar rendimiento de ellos.
Este último caso es especial porque se enmarca en una tendencia llamada la “tokenización” de las inversión en la que, a través de tokens las empresas DeFi permiten que sus usuarios inviertan en productos tradicionales.
Esto, según el reportaje y varios expertos consultados, sigue teniendo sus riesgos y está más enfocado en un segmento de inversionistas que no pueden acceder a las vías tradicionales para la inversión.
Así, ante la falta de una normativa que impida esto, las empresas DeFi están ofreciendo un producto más seguro que las criptos, pero aún hay riesgos, así lo asegura S&P Global Inc. quien explica que por aún con los aspectos positivos, hay problemas tanto legales como operacionales con este tipo de tokens.
“El concepto de titulizaciones de DeFi plantea algunos riesgos fundamentales, en particular riesgos legales, riesgos operativos y el posible desajuste entre los activos en moneda fiduciaria y los pasivos en moneda digital”.
Por estos detalles aún hay mucho por recorrer para las DeFi que se están embarcando en proyectos como este. Se sabe que desde el gobierno de Estados Unidos se está trabajando en reforzar las regulaciones para controlar este vacío legal y hay muchas partes que se tienen que solventar para que una empresa de total seguridad por un activo como este.
Aún así, esto demuestra que el mundo cripto y digital se niega a rendirse. Esto es un paso que puede abrir muchas puertas para las empresas que se dedican a este sector
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