Se abren las puertas para la minería a escala en México

Los cambios a la Ley de la Industria Eléctrica y su conexión con la minería de Bitcoin (BTC)

Esta semana, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) declaró que el decreto de reforma a la Ley de la Industria Eléctrica presentada por el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y avalada por los diputados de su partido es constitucional. 

Esto significa que el estado se reserva el derecho de decidir el orden de despacho en el que se entrega la energía eléctrica y no lo decidirá más el mercado. 

Para entender a fondo el panorama, y las implicaciones, estudiemos algunos puntos antes:

En 2017, en Estados Unidos, cuando las empresas que se dedican a la minería de Bitcoin solicitaban cientos de MW de potencia eléctrica a las operadoras de servicio eléctrico, los operadores no lo podían comprender. Nunca antes habían entregado esos volúmenes de capacidad en 30 años.

Hoy, en 2022 se invirtió esa tendencia. Los operadores de generación y transmisión han comprendido las ventajas de una carga base flexible. Y esto es porque se han dado cuenta de que con la entrada de cada vez más generación renovable intermitente como la solar y la eólica, los generadores de carga base reciben cada vez menos ingresos y la minería de Bitcoin ayuda específicamente a revertir esta situación.

Dicho de otra forma, algunas plantas de generación de carga base, la red les demanda menos energía, lo que significa menos venta, por entregar menos kWh. Esto definitivamente es un problema serio que afecta el ROI y la economía de gigantes macroplantas de generación y que es muy difícil de solucionar. 

Pero antes de profundizar en cómo la reforma va a disparar la minería en México, veamos cómo se está dando y cómo se va a dar la minería digital en el país.

El costo de minar en México

Minar Bitcoin en México no es barato. El suministro básico lo lleva a cabo la empresa estatal CFE, y la tarifa más conveniente para los mineros es la denominada Gran Demanda Media Tensión Horaria (GDMTH).

Para que nos hagamos una idea, en promedio la tarifa integrada considerando costo por consumo y por demanda, en el lugar con mejor tarifa es de 0,10USD/kWh. Esto para la Zona Norte que comprende a los estados de Coahuila, Durango y Chihuahua.

Las tarifas menos favorables las encontramos en la Zona Baja California Sur,  con 0,14USD/kWh. Pueden ver las tarifas actualizadas al mes de abril aquí.

Si la demanda que requieres en tu centro de consumo, excede los 1,000 KVA, la Ley de la Industria Eléctrica te obliga a utilizar el mercado eléctrico mayorista y contratar a un suministrador calificado que puede ser el mismo CFE, u otro diferente que actúa de intermediador entre el consumidor y el generador.

A través de esta modalidad se pueden acceder a precios más favorables en definitiva, y es normal observar ofertas de alrededor de 0.075 USD/kWh y que representan un 25% de ahorro versus el proveedor básico.

Sin embargo, esto no es energía económica en ningún caso. La minería de Bitcoin tiene la particularidad que no está restringida a un lugar específico, dado que puedes conectar tu equipo de minería en Tamaulipas, tan fácil como conectarlo en Chiapas, o en Paraguay. Siempre se van a acercar a la fuente de energía más económica.

Y cuando en Paraguay los precios rondan los 0,04USD/kWh, en Venezuela cerca de 0,01USD/kWh y acá cerca en Texas ronda los 0.025-0,04USD/kWh, directo de las redes industriales de las ciudades, es lógico que la actividad de minería de Bitcoin se vea escasa en el país del tricolor.

Minar con energía solar y eólica

También, se han conocido casos sobre minería de Bitcoin que en México ya empiezan a utilizar energía renovable. Estas fuentes intermitentes, justamente por esa debilidad, tienen la particularidad de tener constantes excedentes y bajos precios por kWh. Ambos factores que algunas empresas empiezan a aprovechar en México, pero de las cuáles no se tiene información certera.

Definitivamente la flexibilidad geográfica de la minería de Bitcoin y el rápido despliegue que permite, hará que las plantas de generación eólicas y solares del país miren con deseo a este nuevo comprador de excedentes energéticos que tomará cada vez más relevancia.

Minar con gas que estamos quemando 

México pierde 4 mil millones de pesos anuales por gas natural que no puede aprovechar y debe ventear o quemar, de acuerdo a un reportaje de Reforma en 2021. Esto debido a que durante la extracción petrolera se extrae también gas natural que por lo general no tiene manera de aprovecharse en sitio, transportarse o venderse. Principalmente porque es muy costoso construir proyectos de largos gasoductos. Por ello, se termina quemando en la mayoría de los casos, lo cual continúa incrementándose en México, decarrilando los esfuerzos por combatir el cambio climático mientras se intenta incrementar la producción petrolera.

La cantidad de gas que se pierde, ha sido estimada en 100 mil millones de pies cúbicos al año, lo que podría significar un potencial de generación de energía eléctrica de unos 1500MW. Algo para nada despreciable, porque esto sería alrededor de 10% del consumo actual de toda la minería de Bitcoin en el planeta. Un recordatorio más de lo pequeña que es la red, y de los grandes desperdicios energéticos de la humanidad.

Generar energía y entregársela a la red podría ser una opción, tan sólo si crear líneas de transmisión no fuera tan costoso y no se perdiera tanta energía en dicho proceso (entre 2%-6%).

Es por eso que la minería de Bitcoin es una de las opciones más brillantes para aprovechar esa fuente de energía que no solamente está siendo desperdiciada en este momento, sino que tiene un impacto mayor el quemarlo en un “mechurrio” que consumirlo en un generador eléctrico por la eficiencia en la combustión.

Hoy, hay muchas empresas que se dedican totalmente a la minería de Bitcoin aprovechando gas de pozos y que ofrecen soluciones completas, demostradas además en campo, como es el caso de JAI Energy, de Texas/Wyoming, quienes tienen firmes intenciones de iniciar muy pronto operaciones en México y expandirse por todo Centroamérica y Suramérica.

Minar directo desde la generación

La minería de Bitcoin de por sí es la manera más rápida y eficiente hoy en día de convertir la energía en valor. Una vez que un electrón entra a un equipo de minería, en minutos puedes tener dinero real en tu cuenta. Esto significa una altísima eficiencia intrínseca, a diferencia de cualquier otro proceso industrial que por definición conlleva ineficiencias y pérdidas.

Ahora bien, el suministro de energía eléctrica a los mineros que se conectan a la red eléctrica sufre de los problemas de cualquier red de transmisión y distribución. Se producen pérdidas. Sólo en transmisión podemos hablar de entre 2%-6%, por ejemplo. Y la confiabilidad es menor mientras más larga sea la distancia entre la generación y el consumo.

Lo anterior, aunado al costo que significa este servicio de transmisión, lleva a los mineros naturalmente a acercarse a las fuentes de generación. Mineros minando dentro de los predios de hidroeléctricas, minando dentro de termoeléctricas, minando incluso con plantas de generación dedicadas, son casos cada vez más comunes en Estados Unidos, y que en México ya se empiezan a observar.

El caso más emblemático del 2022 será el de la Planta Geotérmica “Domo de San Pedro” en Nayarit, en donde Ricardo Salinas Pliego ha manifestado su intención de minar durante este mismo 2022. Esto marcaría un ejemplo a seguir en la industria energética del país, convirtiéndose en el modelo para el aprovechamiento de la energía para el minado directamente desde dentro de las plantas de generación.

Los cambios a la Ley de la Industria Eléctrica y su conexión con la minería BTC

Volviendo al párrafo inicial, recordemos que la propuesta de la reforma eléctrica se basa en “volver a tener el control” por parte del Estado, debido a que el despacho está actualmente fundamentado en un mercado eléctrico mayorista, cuyas fuentes de energía son principalmente el ciclo combinado y las energías intermitentes. En teoría el estado tendría el control en la decisión de las funciones de las distintas fuentes (carga base, carga pico, carga intermitente).

En palabras sencillas: El estado puede decidir qué planta de generación tiene prioridad sobre cual, lo que obviamente utilizarán para garantizar sí o sí que la energía que genera la Comisión Federal de Electricidad sea la primera que se utiliza.

La consecuencia de esto será que otras plantas de generación incluso construidas recientemente luego de tener reglas de mercado claras deberán reducir su producción, deberán de producir menos energía lo que significa directamente menores ingresos e incluso posibilidades reales de quiebra.

El riesgo de que tu principal cliente (la red eléctrica) decida no adquirir más el producto que tú fabricas (energía eléctrica), es lo que se conoce como riesgo de contraparte, definido como el riesgo al que se enfrenta la empresa, originado por el incumplimiento de las obligaciones de su contraparte.

Esta decisión de la SCJN abre de golpe la puerta para la minería de Bitcoin en México. 

Es una serendipia que viene a dejar disponible seguramente varios cientos de MW de capacidad que las empresas privadas estaban vendiendo, y que ahora no van a poder colocar.

Esto no es primera vez que ocurre. De hecho un caso icónico de excedentes de capacidad por decisión de la contraparte es el caso de la hidroeléctrica de DataCenter CR en Costa Rica. El estado decidió sin previo aviso no comprarle ni un electrón más de sus 3MW de capacidad en esta pequeña hidroeléctrica. La solución: Luego de 9 meses, ya esta empresa se encuentra monetizando la mitad de su capacidad a través de la minería de activos digitales.

El futuro brillante de la minería de Bitcoin en México

Sin darse cuenta, y sin conocer absolutamente nada al respecto de un tema tan relevante, el estado a través de un excesivo control y manipulación de un mercado que debería ser más libre, está abonando todo el terreno para que florezca en este país la industria más excitante de los últimos tiempos.

El futuro luce prometedor y la labor que nos corresponde hacer en los próximos meses es la de poder educar a los especialistas energéticos en que existe un comprador de último recurso; existe un comprador que siempre va a comprar la energía que le coloques; un comprador que reduce al mínimo el riesgo de contraparte; un comprador que hay que tratarlo como VIP, porque consume las 24 horas del día, los 365 días del año; un comprador que es de las pocas formas de carga flexible que puede ser desconectada de manera inmediata sin generar pérdidas operativas.

Por nuestra parte estaremos divulgando más y más información sobre la intersección de la minería, la energía y el gas en los meetups mensuales que realizamos todos los meses en la Ciudad de México. Para conocer más pueden escribir a la cuenta de Minería Disruptiva @mineriapodcast en Twitter.

Ojalá se den cuenta muy pronto los generadores que MEGAVATIO QUE SE DEJE DE DESPACHAR, MEGAVATIO QUE SE DEBE DE PONER A MINAR.

La minería de Bitcoin, entonces, aparece en la escena como ese nuevo comprador de último recurso. Y más allá de eso, aparece como superhéroe a salvar el día y poner en buen uso la energía que va a quedar disponible, en excedente, sin uso. Incluso posiblemente evite el cierre de algunas de ellas y la pérdida de empleos como lo logró nuestro superhéroe en Costa Rica. 

Ya sea porque tenemos décadas quemando gas de venteo, o porque por una decisión estatal se desea despachar la energía eléctrica en otro orden, la minería de Bitcoin va a transformar el mercado de la energía en México y en el mundo.